Feligresía vallenata vivió el primer domingo sin asistir a los templos

Cerrados permanecen los templos católicos de Valledupar. Las misas se están transmitiendo por las redes sociales para atender de manera espiritual a los fieles.

POR
NINOSKA
REYES URDANETA

Aún sin ver y sin entender, Jesús yo confío en ti”. Bajo esta premisa, miles de vallenatos vivieron ayer su primer domingo sin asistir a los templos católicos de la ciudad, respondiendo a las restricciones decretadas en Valledupar y el Cesar, por la propagación del coronavirus o Covid-19, y más aún con la confirmación del primer caso en este territorio.

Es así como ayer desde las 7 de la mañana, la iglesia La Inmaculada Concepción en el centro de Valledupar, dispuso de un equipo técnico y humano para llevar la Iglesia a cada hogar vallenato a través de las redes sociales. Facebook, Instagram, Twitter y YouTube, están siendo los canales utilizados para promover una hoguera de amor, una Iglesia doméstica.

Doriam Rocha, párroco de la Iglesia Inmaculada Concepción, informó que desde el mismo momento que se emitió el decreto municipal sobre la restricción de reunir un máximo de 50 personas en sitios cerrados, por  temor a la propagación del Covid-19, desde la Diócesis de Valledupar se redujo a 40 y se iniciaron las transmisiones vía web para aquellas personas que no podían asistir al templo.

Las eucaristías pueden seguirlas a través de las siguientes cuentas: @padredoriamrocha (Instagram), padredoriamrocha por el canal de YouTube y parroquiainmaculadaconcepción en Facebook.

Explicó el párroco, que inicialmente se programaron más eucaristías y desde el viernes que se decretó el aislamiento obligatorio en el municipio y el departamento del Cesar, se montó todo el equipo y se están haciendo las transmisiones en cuyas redes, el número de usuarios supera los 23.000.

A nadie se le está permitiendo la entrada al templo desde el jueves pasado, el único personal habilitado para las transmisiones está confinado en la casa parroquial, son siete personas para el equipo de producción, una monja y tres sacerdotes.

En el día se están transmitiendo entre dos y tres misas. Ayer domingo se celebraron a las 7 de la mañana la primera, luego a las 10 se llevó a cabo la Misa de la Familia y otra a las 5 de la tarde.

Las intenciones se reciben a través de mensajes por WhatsApp, es decir, aquellas personas que necesitan elevar oraciones por sus deudos. Las exequias de la ciudad, se realizan en la nueva catedral del Santo Ecce Homo, por ser un lugar muy amplio en el que las personas pueden mantener una distancia prudente, pero igual se restringe el número a 30 fieles. Los bautizos, matrimonios están suspendidas hasta nuevo aviso.

SEMANA SANTA EN CASA

Los templos están vacíos, pero la Iglesia está llena porque cada día son más los hermanos que se están conectando desde cualquier parte del mundo a través de las nuevas tecnologías, dijo el padre Doriam Rocha.

Con respecto a la Semana Santa, los templos siguen cerrados. Todas las eucaristías serán transmitidas y los hermanos desde sus casas serán bendecidos, la Iglesia ahora va a donde están ellos, una hoguera de amor, una Iglesia doméstica.

Se llamará Semana Santa en Casa, y así puede vivirla toda la familia. El lunes Santo a las 10 de la mañana se hará la misa en honor al santo patrono Ecce Homo, igual desde las redes sociales, y quienes tienen sus promesas que cumplir cada año a Jesús de Nazareth o Ecce Homo, pueden hacerlo desde su casa, Monseñor ha dado el indulto y no obliga a nadie acudir al templo. El Papa y la Conferencia Episcopal Colombiana también lo han ratificado.

Esta es la manera de comprender que debemos tener dos amores profundos, el amor a Dios y a nuestra familia y esto hará que tengamos amor a nuestros prójimos y podamos pensar en los demás. “Esto que estamos viviendo es el querer de Dios siempre, que desde nuestra familia podamos vivir la fe, reflejar a Cristo en el mundo entero. Hagan su comunión espiritual y aprendan a valorar la presencia de Dios. Es la oportunidad de aprender a amar los sacramentos, especialmente la presencia real de Cristo en la eucaristía”, afirmó el padre.

Destacó que en estos tiempos difíciles, la Iglesia se ha organizado en sus parroquias y los días que podían hacer la movilidad, les llevaron mercados a las familias más vulnerables de la ciudad.

Se organizó una experiencia que se ha llamado “Los Anawines de Yahveh”, donde muchas familias se unieran y se entregaron sobres a indigentes y vendedores ambulantes, logrando acercarse a unas 150 personas durante los días viernes y sábado de la semana pasada.

Este marte se pide en lo posible que no se aglomeren en supermercados, hay que mantener la calma.  Desde las administraciones locales también se podría llegar a esta población vulnerable con las medidas de prevención establecidas.

NO HAY QUE PERDER LAS ESPERANZAS

Esto va a pasar, afirmó el padre Rocha, quien hizo el llamado a no perder las esperanzas, esto pasará como lo han hecho tantas tormentas. “Ha sido duro y es la situación que más ha estremecido a la humanidad, pero todo esto ha sido necesario. Yo sé que Dios está haciendo una obra, Dios no se equivoca, sin embargo, él no ha mandado esto y eso hay que dejarlo claro;  el Señor de lo negativo saca lo positivo, hace el bien y una obra maravillosa”.

Resaltó que otro de los puntos positivos de esta situación es que se está permitiendo que la naturaleza respire, que los hombres hagan un alto en el camino y no se acostumbren a pesar que todo lo merecen.

Es hora de hacer un alto, de darse cuenta que no todo es trabajo, que hay una familia que necesita, hay que aprovechar este momento. Primero nunca perder la esperanza, ser agradecidos con todo lo que se ha vivido, asumir el pasado con gratitud, el presente con compromiso y el futuro con esperanza.

“Este es el mensaje que hay que darle a la humanidad entera, nunca perder la esperanza, ser agradecidos y asumir el compromiso de pensar en los demás desde mi casa, poder orar por personas que lo necesitan porque les toca exponerse como los médicos, bomberos, policía, ejército y otros profesionales que arriesgan sus vidas por salvar otras”, afirmó.

La Iglesia no ha dejado solos a sus fieles, está con ellos  y hoy se vale de las nuevas tecnologías para vivir de una mejor manera a través de la fe.

DISPOSICIONES DE LA DIÓCESIS

A través de un comunicado, monseñor Oscar  Vélez, obispo de la Diócesis de Valledupar, anunció las disposiciones que desde el 21 de marzo se están cumpliendo en este territorio como medidas de prevención contra el coronavirus. Dice textualmente el documento:

– Los sacerdotes deben tener en cuenta que el teléfono y los diversos medios de comunicación pueden ser una oportunidad maravillosa para estar cerca de las personas enfermas, ancianas o que más necesiten de nuestro servicio pastoral.

– Las emisoras diocesanas, con cobertura en Valledupar, transmitirán diariamente la Eucaristía. Esplendor de la Verdad: de lunes a viernes a las 6.30 p.m., sábados a las 5 p.m. y domingos 7 a.m., 10.30 a.m. y 6 p.m. Ecos de la Buena Noticia, lunes a viernes 6 a.m. y 6 p.m., sábados: 5 p.m., domingos: 7 a.m., 9 a.m., 6 p.m.

– Este tiempo debe ser para nosotros, sacerdotes, una nueva manera de vivir la pascua: un tiempo de oración, de lectura bíblica y espiritual, de actualización teológica. En fin, unos verdaderos ejercicios espirituales. Pero también un tiempo para extrañar la presencia de nuestros fieles y del culto público, un poco la espiritualidad del exilio.

– Quiero también informarles que a partir del próximo sábado 21 de marzo he decidido enviar a los seminaristas a misión en sus familias hasta el día 20 de abril. Durante ese tiempo se les enviarán diversos subsidios virtuales para continuar sus estudios.

 – Yo, Dios mediante, presidiré, en forma privada, en la Catedral del Ecce Homo las celebraciones de la Semana Santa, conforme al siguiente horario: Domingo de Ramos: 11 a.m.; Jueves Santo: 5 p.m.; Viernes Santo: 5 p.m.; Vigilia Pascual: 7 p.m.; Domingo de Pascua: 11 a.m. Procuraremos que sean transmitidas por radio, televisión y redes sociales de Instagram y Facebook.

– La misa crismal, la celebraré, Dios mediante, conforme está programado, el jueves 2 de abril a las 9 a.m. en la Catedral del Ecce Homo. En nombre de todo el clero están invitados a participar: los miembros del Consejo Presbiteral, del Consejo de Pastoral y los diáconos.

– Quienes hayan realizado una promesa al Ecce Homo quedan dispensados de cumplirla en este momento. Lo podrán hacer una vez se normalice la situación, cuando procuraremos, Dios mediante, hacer una celebración especial en honor de nuestro patrono.

– Algunos templos y capillas, de acuerdo a la discreción de los párrocos y con las debidas medidas de respeto y seguridad, estarán abiertos para la oración personal de los fieles.

 – Las exequias en Valledupar se realizarán sólo en la Catedral del Ecce Homo con un máximo de 30 personas cercanas. En los municipios se realizarán en la Iglesia parroquial sin exceder también el número de 30. Dicha celebración no debe exceder los treinta minutos. – Hay que advertir que no está permitido confesar los pecados por teléfono o por WhatsApp. Se puede conceder la absolución por estos medios, con la condición de confesarse una vez pase este momento de crisis.

 “Vivamos este tiempo como una oportunidad para anhelar los bienes espirituales y sacramentales a los que a veces nos podemos acostumbrar y no valorar lo suficiente. Sembremos en nuestros fieles, con nuestras palabras y comportamiento, ánimo y esperanza. Oremos al Señor por todas las víctimas de esta pandemia y pidamos que nos dé fortaleza y libre pronto a la humanidad de sus terribles efectos”, afirmó monseñor en el comunicado por el que se regirá la Diócesis de Valledupar.