El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, aseguró que en caso de que no se apruebe la reforma tributaria propuesta por el Gobierno (o la ley de financiamiento) en el Congreso, el Ejecutivo la radicará nuevamente.
Con esta nueva tributaria, el Gobierno espera recaudar $12 billones que tendrán como propósito financiar el presupuesto del año entrante por $523 billones.
Bonilla sostuvo, en el marco del congreso de Asofiduciarias, que en caso de que no se apruebe inicialmente el proyecto se tendrá un aplazamiento de recursos en el mes de enero.
“Nosotros tenemos que decretar el presupuesto y se decreta lo que quedó radicado. El 2 de enero sabremos si ese presupuesto está financiado o no. Si no está financiado el 2 de enero, tengo que hacer un decreto de suspensión de presupuesto en la parte que no esté financiado”, añadió Bonilla.
En los próximos días será programada una reunión entre el Ministerio de Hacienda y los ponentes de esta iniciativa, con el fin de que avance su discusión en el legislativo.
En esta nueva reforma tributaria se busca imponer IVA del 19% a servicios de Airbnb, vehículos híbridos y plataformas de juegos de azar en línea. Mientras que en el caso de proyectos de energías renovables este impuesto tendrá una exención.
Sobre la meta también está aumentar el impuesto al carbón, pasando de $25.000 a $75.000 por tonelada, así como mantener la tasa del impuesto corporativo en 35% para industrias extractivas.
Uno de los mayores cambios que se propone es la tarifa del impuesto sobre la renta para las personas naturales residentes en el país, que pasaría del 39% al 41% para las personas que ganen más de $121 millones al mes (más de 31.000 Unidad de Valor Tributario).
Asimismo, se busca reducir la tasa del impuesto de renta corporativo del 35% al 30%,mientras que para el caso de las mipymes, este será del 27%.
La Dian podría, incluso, entregar recompensas del 20% para aquellas personas que denuncien la evasión de impuestos por encima de los $250 millones.
/LaFM