Diario del Cesar
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El poder de los jóvenes para renovar la democracia  

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El próximo 5 de diciembre se abrirán en Colombia las urnas para elegir a quienes conformarán los Consejos Municipales de Juventud, en un certamen democrático en el que, según lo que prevé la Registraduría, deberían participar unos 12 millones de jóvenes, entre los 14 y los 28 años, lo que significa, de paso, una primera experiencia real de participación electoral de colombianos menores de edad. Podrán participar en esta jornada electoral los jóvenes que están entre 14 y 18 años, lo que es, sin duda, un paso adelante en la necesidad de cualquier país, pero en particular el nuestro, de incorporar nuevas generaciones y nuevas ideas al panorama político.

Pero, ¿qué son los Consejos de Juventud? Son mecanismos autónomos de participación, concertación, vigilancia y control de la gestión pública e interlocución de los adolescentes y jóvenes ante los entes municipales y territoriales del país.

Hace dos meses venció el periodo de inscripción de candidatos de partidos, movimientos, procesos, prácticas organizativas de las juventudes y listas independientes a las elecciones de los Consejos Municipales y Locales de Juventud que se realizarán el 28 de noviembre de 2021. Y fue una inscripción masiva en todo el país.

Para este proceso democrático, la Registraduría Nacional del Estado Civil, mediante convocatoria pública, vinculará a 2.000 jóvenes de 18 a 28 años para que presten apoyo al certamen electoral en los 1.097 municipios del país donde se elegirán los Consejos Municipales y en las 33 localidades que componen las ciudades de Barranquilla, Bogotá, Buenaventura, Cartagena y Santa Marta, donde se elegirán los adolescentes y jóvenes a los Consejos Locales.

Lo que van a elegir los noveles electores es a los consejeros municipales, distritales y locales, para que sean representantes y voceros suyos ante las autoridades, con las que deberán concertar las agendas gubernamentales de juventud, pero que también tendrán en sus manos la gran responsabilidad de vigilar y controlar la gestión pública de las administraciones locales del país. Así, la elección que se aproxima tiene vital importancia en tanto creará una nueva instancia, esta vez a cargo de los jóvenes, que tendrá tres funciones tan importantes frente al Estado como la interlocución, la concertación y también la veeduría y control sobre la gestión pública.

Pero, si bien estos nuevos Consejos y sus funciones, dentro de un proceso bien orientado y sostenido, tendrán gran importancia, es también determinante el hecho de que se abran espacios de debate ideológico, político y de liderazgo comunitario para los jóvenes, tradicionalmente subestimados y marginados de la acción proselitista y de la toma de decisiones en nuestro país, cuando, bien vistas las variantes que tiene la historia, son los jóvenes los que tienen en sus manos y en sus mentes, la posibilidad real de renovar el medio en el que se les permita actuar con amplitud y respeto, y la política, claro está es uno de esos importantes frentes donde se les debe recibir sin cortapisas de ninguna especie.

Solo queda esperar que el proceso que empiezan estos muchachos no vaya a ser, ni ahora, ni después, infiltrado por las viejas casas políticas y partidos que lleven allá sus anacrónicas y corruptas costumbres que tanto daño han hecho a la democracia colombiana.

Tan importante como abrir las puertas del ejercicio político, ideológico y proselitista a los jóvenes, es respetar su identidad, sus espacios y sus decisiones, y esto se hace sin interferir, de ninguna manera, en sus procesos. La invitación a todos los jóvenes es a votar.