Diario del Cesar
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El crimen del taxista que en Casimiro no olvidan 

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Un taxista hace dos años fue asesinado a balazos en un atraco presentado en el barrio Casimiro de Valledupar, es este uno de los casos que más conmovió a la ciudadanía vallenata para el año 2018.

Dicen quienes conocieron a Wilman José Arias Sáenz, de 55 años, que él era una persona ejemplar, siempre amable con sus amigos y allegados, además buen conversador. Siempre estaba dispuesto a ayudar a quienes lo necesitaban, pues esa es la imagen que dejó en la memoria de la comunidad.

 “Él era una persona muy cordial con sus vecinos, con sus amigos, era un taxista ejemplar siempre dispuesto a servirle a la gente, infortunadamente murió estas circunstancias”, comentó un taxista de Valledupar.

Pero Wilman José Arias Sáenz, perdió la vida en un infortunado hecho. Era el 27 de septiembre del año 2018, en horas de la tarde el taxista estaba a la espera de que le entregaran el vehículo de transporte público en el que laboraba en la jornada nocturna para ofrecer sus servicios en las calles de esta ciudad.

La víctima había terminado comer cuando dos hombres a bordo de una motocicleta se le acercaron para robarlo, quitándole un celular de alta gama, y en el mismo acto le propinaron un disparo en la cabeza, quedando agonizando durante varios minutos.

Los vecinos del sector intentaron auxiliarlo y junto con las autoridades lo trasladaron hasta el Centro de Desarrollo Vecinal, (CDV) a donde llegó sin signos vitales.

“No puede ser posible” “Ese señor no se metía con nadie” “Como puede ser posible todo esto”, fueron estas unas de esas tantas expresiones de amigos y allegados quienes no pararon de lamentar el hecho al mismo tiempo que pedían a las autoridades que se hiciera justicia.

El taxista residía en el barrio donde fue ultimado, dejó 8 hijos y era separado.

LAS INVESTIGACIONES 

as investigaciones fueron avanzando por parte de las autoridades para darle claridad a este hecho por lo cual recolectaron suficientes elementos materiales probatorios y pudieron dar con la aprehensión de Osneider Fuentes Alberto, de 28 años, señalado de participar en el crimen de un taxista el 27 septiembre del año 2018 en el barrio Casimiro Maestre de Valledupar, y al parecer, aceptó su responsabilidad en el hecho violento.

Fuentes Alberto tiempo más tarde fue presentado en el Juzgado Segundo Penal Municipal con funciones de control de garantías, ante la vista pública el antes mencionado aceptó su responsabilidad con el fin de obtener una rebaja de la pena.

El procesado fue señalado en su momento por los delitos de homicidio agravado, fabricación, tráfico o porte o tenencia de armas de fuego, hurto calificado agravado en grado de tentativa, tras ser aprehendido en el barrio La Nevada.

Fuentes contaba una medida de aseguramiento domiciliaria vigente por fabricación, tráfico y porte de armas de fuego y municiones (2012) en Valledupar.

Sin embargo, el antes mencionado pese a contar con sistema de vigilancia electrónica (brazalete) del Inpec, al parecer, infringía dicha medida de forma reiterativa. Además, se pudo conocer que este sujeto estaba indiciado por agresiones personales 2013 y 2014 Valledupar, y por violencia intrafamiliar (2011) en Bogotá.

 “Este señor fue reconocido por una testigo presencial de los hechos como uno de los partícipes del crimen. De tal manera que estos elementos probatorios y evidencias documentales que ha portado la Fiscalía soportan que efectivamente el día 27 de septiembre de 2018 dos personas irrumpieron en la residencia que la víctima compartía con su familia y utilizando armas de fuego se pretendió hurtarles las pertenencias a las personas que se encontraban en ese lugar y cometieron el fatal desenlace. Entonces no existen dudas de que se adecue el comportamiento de los individuos a las predicciones del código penal denominada como homicidio agravado y los demás delitos en la medida que se utilizó un arma de fuego”, dijo el togado en audiencia.

Han pasado ya dos años de la muerte de Wilman José Arias Sáenz, un crimen que aún en el barrio Casimiro de Valledupar no olvidan. “Un buen hombre, buena persona y muy respetuoso, nunca lo olvidaremos”, mencionó un morador de la zona donde ocurrió el hecho.