Mujeres firmantes de paz avanzan en autonomía económica
CON 2.765 PROYECTOS PRODUCTIVOS
Más de 3 mil mujeres firmantes del Acuerdo de Paz se han convertido en líderes comunitarias, impulsando proyectos productivos que no solo les brindan independencia económica, sino que también fortalecen el desarrollo social y económico en sus territorios. De ellas, 2.765 han recibido desembolsos para iniciativas en sectores como la agricultura, comercio, industria, ganadería y servicios, demostrando el impacto positivo de su reincorporación en la vida productiva del país.
Estos proyectos, que han contado con una inversión total de $19.934 millones provenientes del Presupuesto General de la Nación, han permitido que las firmantes del acuerdo tengan mayores herramientas para su sostenibilidad económica. Además, 20 iniciativas productivas colectivas lideradas por mujeres han sido incluidas en la Estrategia de Sostenibilidad, lo que garantiza su fortalecimiento y continuidad.
AVANCES Y DESAFÍOS
Las mujeres firmantes representan el 27% del total de personas en proceso de reincorporación y han asumido un papel clave en la construcción de paz, liderando iniciativas políticas, sociales y comunitarias. Sin embargo, pese a los avances, persisten desafíos estructurales que dificultan su estabilidad económica, como la falta de acceso a empleo digno, la estigmatización y los roles de género que aún limitan sus oportunidades.
La falta de acceso a crédito y tierra es otra de las principales barreras para el crecimiento de sus emprendimientos. A esto se suma la sobrecarga de labores de cuidado y la discriminación en el mercado laboral, factores que restringen su independencia financiera y su capacidad de fortalecer sus negocios.
Para Alejandra Miller, directora de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), la fecha del 8M es una oportunidad para reconocer el esfuerzo de estas mujeres: “Queremos resaltar el papel de las mujeres firmantes de paz quienes, en medio de enormes dificultades, siguen avanzando en los procesos de construcción de cambio y de paz. Desde la ARN seguimos trabajando para que fortalezcan su liderazgo y que la autonomía económica sea una herramienta para transformar los ciclos de violencia”.