En declaraciones dadas este lunes en la jornada de descenso del Tour de Francia, el corredor colombiano Nairo Quintana afirmó que “lamentablemente se ha torcido”.
Esa fue la expresión del boyacense sobre la competencia,en la que ya no peleará por la general y se concentrará en ayudar a su compañero Mikel Landa con el objetivo de alcanzar el podio.
“El día de la caída me descuadró bastante, pensaba que no pasaría nada, que recuperaría bien, pero no”, declaró Quintana, quien ocupa la casilla 13 de la general, a 8:28 del líder Julian Alaphilippe.
El colombiano se fue al suelo el miércoles, en la etapa11 con final en Toulouse. Y luego perdió tiempo en la contrarreloj del viernes y volvió a ceder terreno el sábado en el Tourmalet.
En la subida a la mítica cima su equipo, Movistar, endureció la carrera y Quintana fue uno de los perjudicados, al no poder seguir al grupo de los mejores, lo que ha provocado una polémica sobre la falta de comunicación entre los líderes del equipo español.
“No nos dijo nada de que iba mal”, insistió Valverde sobre Quintana, que desmintió al campeón del mundo español minutos después.
“Cuando estábamos en el Soulor (penúltimo puerto del día) ya les decía que ‘tranquilos’, cuando iba tirando Andrey (Amador), porque estaba pasando un momento de crisis”, relató el colombiano de 29 años.
“Pero Mikel estaba bien y pidiendo un poco más de gas. Insistió en seguir fuerte. Yo tampoco quiero que me ‘jodan’ mi momento”, añadió.
“Cuando empezamos el Tourmalet me defendí como pude y él estaba aprovechando para sacar su diferencia”, añadió sobre su compañero.
Gregario de Landa
A falta de una semana para la meta en París, ¿cómo afrontará Quintana su papel de gregario para ayudar a Landa a alcanzar el podio?
“De momento voy a esperar a ver qué dice el equipo y seguir para adelante. Busqué hacer estrategia con el equipo, ayudar a Mikel que estaba mejor que yo”, recordó Quintana, sobre su participación en la escapada del día.
Finalmente Quintana, al que muchos sitúan fuera del Movistar el próximo año, intentó restar importancia a su situación.
“Así es la vida, a veces vienen momentos buenos y a veces malos. En este momento no estoy bien y no sé si más adelante volveré a sonreír”, concluyó el ganador de una Vuelta y un Giro.