Nueva banda de narcobuses fue desmantelada por la fiscalía
Siete hombres y tres mujeres fueron detenidos en una operación de la Fiscalía y la Policía señalados de hacer parte de una organización que se dedicaba a adecuar buses para el transporte de cocaína. Concierto para delinquir y tráfico de estupefacientes fueron los cargos que les imputaron, pero ninguno de ellos los aceptó.
Durante la investigación se logró establecer que la banda compraba cargamentos de cocaína en Cauca y Putumayo los cuales eran llevados en camiones y camionetas hasta La Guajira. Una vez en la península, a los buses de turismo les adaptaban caletas para el transporte del alcaloide.
Las carrocerías, portaequipajes y chasis eran modificados para que tuvieran capacidad de almacenar entre 160 y 300 kilos de droga. Los investigadores señalaron que por cada kilo que lograban poner en La Guajira, la banda recibía seis millones de pesos.
Dice el ente acusador que este año lograron comprobar 22 casos en los que tendría participación esta banda cuyos jefes fueron identificados como Pablo Emilio Caicedo, el cabecilla, y José Daniel Ordóñez, el segundo al mando.
“En una de las diligencias fue inmovilizado un bus de servicio público que cumplía la ruta Puerto Asís (Putumayo) – Bogotá, y sus 30 pasajeros desconocían que entre el maletero y la llanta de repuesto iban camuflados 300 kilos de droga”, dice el reporte de la Fiscalía.
El mismo informe reporta que Caicedo y Ordóñez financiaban todo el engranaje ilegal, la esposa de uno de ellos era la contadora y los demás cumplían tareas de logística y vigilancia.
“La banda habría establecido una modalidad de caravanas de seguridad en la que el vehículo que llevaba la droga era antecedido por un automóvil desde el que sus ocupantes alertaban la presencia de retenes y controles de policía, y seguido por otro carro que servía de escolta”.
Nueve de los detenidos fueron enviados a prisión, mientras que una de las mujeres, que está en embarazo, fue beneficiada con la detención domiciliaria.
BOGOTA (Colprensa).