El legado de Fernando Botero sigue vivo
Durante este primer año sin el maestro, sus hijos se han concentrado en el proceso de la creación de la Fundación Fernando Botero.
El próximo domingo 15 de septiembre se cumplirá el primer año del fallecimiento de uno de los artistas plásticos más destacados de las últimas décadas, el pintor y escultor Fernando Botero.
Tras una vida llena de esfuerzos, pero también de grandes logros y reconocimientos, murió en el principado de Mónaco, donde tenía una de sus viviendas y uno de sus talleres de pintura.
Han sido sus hijos, Fernando, Lina y Juan Carlos, quienes desde tiempo atrás, han puesto en marcha diversos proyectos para continuar con el legado y deseo que dejó su padre, para que su arte y todo su legado siga en contacto con el público, en especial en la labor de impulsar, inspirar y motivar a los nuevos talentos del arte.
Tras una inolvidable despedida que se realizó en Bogotá y Medellín, sus restos fueron trasladados a Pietrasanta (Italia), donde también se encuentran los restos de Sophia Vari, quien fue esposa del maestro desde 1978 y que falleció un poco más de cuatro meses antes de la partida a la eternidad del maestro Botero.
Pietrasanta era otro de los lugares de residencia del artista plástico colombiano, donde contaba con un taller para la realización de sus monumentales esculturas, muchas de ellas ubicadas en las más importantes ciudades del mundo.
Durante este primer año sin el maestro, sus hijos se han concentrado en el proceso de la creación de la Fundación Fernando Botero, la cual se encuentra en un estado avanzado, estará activa hacia el futuro en la organización de exposiciones, la creación de un catálogo razonado de la obra del maestro Botero, la organización de sus papeles, documentos, bocetos y libros para fines académicos y labores de filantropía.
Además, la exposición de ocho esculturas monumentales en los lugares históricos más icónicos de Roma (Italia), llamada ‘Botero en Roma’, confirman al artista como embajador del arte colombiano en el mundo.
Las esculturas monumentales de Botero, conocidas por sus formas voluptuosas y su vibrante expresión de vida, transformaron el paisaje urbano de Roma con su presencia imponente durante tres meses este año.
El lunes 16 de septiembre se inaugurará la exposición, La Grande Mostra, en el Palazzo Bonaparte de Roma, una exposición de 120 obras e irá hasta enero 2025.
Basilea, la capital cultural de Suiza, será la anfitriona de las esculturas monumentales del maestro Botero posicionándose antes, durante y después de la feria más importantes de arte a nivel mundial Art Basel, teniendo lugar esta exposición de esculturas monumentales desde mayo hasta diciembre de 2025.
Se confirmó que a partir de octubre y hasta finales del próximo año se hará una exposición en Bakú, capital de Azerbaiyán; mientras que existen otras actividades pendientes por definir fechas, como una exposición de esculturas monumentales en Pietrasanta, que por el momento tiene como fecha tentativa el verano del 2026, siendo un acontecimiento único, al ser uno de los hogares más queridos de Fernando Botero y epicentro de su creación.
Para diciembre de 2025 se realizaría una nueva gran exposición en Singapur y al siguiente año se transformaría en una exposición itinerante por distintas ciudades de China, empezando en Guangzhou, seguida de Shenzhen, Shanghái y Hong Kong.
Para 2027 ya se habla de una exposición en Arabia Saudita, sin fechas concretas aún, y hay propuestas para invitaciones a España en Avilés y Málaga, en Bruselas, Emiratos Árabes y en Taiwán.
En este último año, posterior al fallecimiento de Botero, su obra se ha visto valorada hasta en un 20%, esto lo demuestran precios récord en subastas, como la pintura subastada en Christie’s, en noviembre 2023, titulada “Los Músicos”, por la que pagaron en 5,2 millones de dólares y otro récord para esculturas con Dancers en Sotheby´s en marzo 2024 en cuatro millones de dólares.