Una mujer derribó la casa de tres pisos donde residía con el padre de sus hijos, en el distrito de Chancay, provincia limeña de Huaral, luego de que un fallo judicial le ordenara entregar el predio de propiedad de exsuegro.
La mujer identificada como Yuriko Ramírez llevó a un grupo de personas para destruir los techos, paredes y calaminas, pues asegura haber erigido la casa y procedió a derrumbarla “porque el señor me está pidiendo el terreno, más no la edificación, porque eso yo lo he hecho”.
Su exsuegro pidió el terreno, luego de que esta acabara la relación con su hijo la cual tenían desde el año 2003, sin embargo la mujer asegura que nunca lo echó y él se habría ido voluntariamente. La relación se tornó turbulenta y la pareja se separó, con su esposo encontrando un nuevo lugar para residir junto a otra persona.
“Hay un documento de la comisaría donde (dice) que él se retira voluntariamente, no es que yo lo haya botado, y se tenía que ir. Actualmente, tiene su casa al otro lado del pueblo. Me ha costado esfuerzo (la construcción), me he privado de muchas cosas, incluso a mis hijos”, añadió.
Por su parte, el suegro de la mujer afirmó que él fue el que construyó la vivienda y que ella, unos días antes que se oficialice la orden de posesión, sacó todas sus pertenencias y la empezó a demoler.
La mujer enfatizó que la demanda de desalojo se centraba en el terreno en sí, no en la estructura de la casa. Expresó que su exsuegro deseaba recuperar su propiedad y que la casa no era el punto de discordia. De igual forma aseguró que a pesar de las dificultades que habían atravesado desde que su esposo los abandonó, manifestó su firmeza en luchar por el bienestar de sus hijos