Un inusitado hecho que demuestra el contenido político de la protesta de la minga indígena en el sur del país quedó demostrado con la revuelta que protagonizaron más de 40 parlamentarios cuando llegaron a las afueras de la Casa de Nariño exigiendo al presidente Iván Duque mediar en el conflicto. “Los congresistas somos representantes de un número muy importante de la sociedad. Hemos venido no ha debatir ni a decidir, sino a presentar iniciativas de salidas y soluciones, pero no nos escuchan´, dijeron.