Cerrando vías, armados con flechas, improvisando fogatas para cocinar y bloqueando el acceso a la Alcaldía de La Paz, Cesar, fueron las vías de hecho utilizadas por cerca de 300 indígenas yukpas incluidos menores de edad, pertenecientes a los resguardos: La Laguna, El Rosario y Caño Padilla; con asentamiento en este municipio ubicado en el norte del departamento.
Con la minga, exigían los compromisos pactados por la alcaldesa Andrea Ovalle durante su campaña política en el 2015, quien a través de un acta firmada, se comprometió a entregar tres transformadores y 10.000 metros de cables al momento de asumir su posesión. Con la protesta se busca subsanar la problemática en materia de electricidad de estos territorios.
Desde las cuatro de la mañana, los indígenas decidieron ubicarse en la parte exterior de las instalaciones de la Alcaldía hasta no concretar un acuerdo rápido y oportuno.
Al plantón, hizo presencia el cabildo gobernador del resguardo Caño Padilla, Alirio Ovalle, quien manifestó que “no hay voluntad por parte de la señora alcaldesa Andrea Ovalle y por eso nos sentimos abandonados. No hay electrificación, tenemos que buscar los alimentos perecederos por unidad porque no hay donde guardarlos, y el lugar más cercano, sigue estando lejos”, comentó.
Para Ovalle, la decisión está sobre la mesa y es avalada por la comunidad: debe haber cumplimiento inmediato en el tema de la luz. Agrega Alirio Ovalle, que de no concretarse la entrega de los transformadores y los metros de cables, “nos tocará seguir tomándonos la Alcaldía, porque ella es la autoridad y debe responder”, dijo.
A lo anterior agregó que el sistema de vacunación es precario, “no hay congelador para guardar los medicamentos porque no hay luz”.
Al lugar, también llegó David Segovia, quien expresó sentirse “engañado” por los incumplimientos durante la campaña de la Alcaldesa; asegura, fue con ese “compromiso que la apoyamos en su candidatura, y hoy a la autoridad de nosotros no la escucha”.
Agregó que durante algunos encuentros, Andrea Ovalle junto al Secretario de Gobierno municipal, han expresado que el proyecto está en “trámites” pero tres años después, “pensamos que ya no lo hará”, acotó Segovia. Dijo que tanto el Cabildo Gobernador como los líderes de los resguardos, tienen en su poder copias de cada visita, firmada por las áreas anteriormente mencionadas y la oficina de Jurídica.
Además, manifestó que son cerca de 1.700 los indígenas los que conforman los tres resguardos y los cuales, hoy se aquejan por las mismas problemáticas.
OTROS PROBLEMAS
Aunque en primer lugar, la falta de electricidad es la que hoy preocupa a las comunidades de estos resguardos, los mismos también han aprovechado para poner en conocimiento otros puntos que han quedado en el ‘tintero’ por la administración de la alcaldía de La Paz; los cuales no han contado con solución y por el contrario, en estos tres años, han elevado las necesidades de esta población.
Jhonny Rafael Gómez, indígena yukpa le manifestó a este medio impreso que “la falta de agua potable y el mejoramiento en nuestra vía de acceso”, estuvieron dentro de los ítems que prometió la alcaldesa.
“Los niños y adultos mayores principalmente no están seguros con las comidas, porque higiénicamente no hay como lavarlas”, comentó Gómez. Detalló que la vía de acceso a los resguardos está en “pésimas condiciones” lo que ha ocasionado que muchos niños deserten de asistir al colegio, al no tener un transporte para dirigirse y “ningún vehículo quiere transitar por esta zona”.
Caminando, los estudiantes pueden demorar hasta dos horas “y es un peligro para los menores”, comentó Jhonny Gómez.
CASA INDIGENA
La minga realizada por la comunidad Yukpa de los resguardos La Laguna, El Rosario y Caño Padilla, el día de ayer en las instalaciones de la Alcaldía municipal de La Paz, Cesar, sirvió para dejar entrever detalles sobre las necesidades que actualmente están vigente en este territorio. Otra de ellas: el olvido a la adecuación de la casa indígena.
“La casa indígena ubicada en la Aduana de La Paz y que se supone debe servir para el resguardo de nosotros los yukpas, no tiene techo, ni luz, ni agua”, comentó Samuel Suárez, indígena de la etnia yukpa. Este olvido, tiene en zozobra a estas comunidades, quienes al bajar de la serranía a citas de salud no tienen donde quedarse y “se ven obligados a dormir en las calles”, dijo Suárez.
Este proyecto, manifestó la alcaldesa de La Paz, Andrea Ovalle, es obligación de la Gobernación del Cesar. Por eso, el medio buscó las reacciones del gobernador Francisco Ovalle Angarita y del Secretario de Gobierno departamental para conocer sus posturas frente a esta situación, pero no atendieron a las llamadas realizadas.
HABLA EL GOBIERNO
Las promesas incumplidas y manifestadas a la comunidad indígena Yukpa por la actual alcaldesa de La Paz, Andrea Ovalle, pueden jugarle una mala pasada a la mandataria, quien siente que a vísperas de elecciones regionales existe “detrás de esta manifestación, los intereses politiqueros de quienes quieren llegar a ocupar mi cargo”. Dejando entrever que la comunidad indígena, puede ser usada para este fin.
Agregó que las constantes expresiones de abandonos que dan a conocer la comunidad son permanentes y más en época electoral. “Muchos candidatos van a tener de ‘caballito’ de batalla los incumplimientos de parte de la administración municipal, y lógicamente los hay, pero estoy con mi conciencia tranquila porque hemos sanado hasta donde hemos podido”, comentó la señora Andrea Ovalle.
Pese a esos posibles fines expresado por Ovalle, la misma mandataria sostuvo que la comunidad Yukpa ha recibido anualmente lo que le corresponde como comunidad indígena. Sobre el proyecto de electricidad, indicó que ya tiene “disponibilidad y recursos de regalías, pero debe ir dirigido a los Órganos Colegiados de Administración y Decisión, Ocap, municipal y eso lleva unos tiempos”, explicó la alcaldesa de La Paz.
Reveló que el valor de este proyecto es de $56 millones y consiste en una dotación de cables y transformadores “porque así lo pidieron ellos en unas actas, afirmando que colocarían la mano obra”, señaló la Alcaldesa. Agregó que este recurso ya posee la última revisión del Ocad y en los términos contractuales de 45 días se les será entregado.
La tardanza, comentó, se debió a temas presupuestal. Del mismo modo, afirmó la mandataria Andrea Ovalle que actualmente, existen varios corregimientos de la zona rural del municipio de La Paz están dando a conocer sus necesidades, “pero los presupuestos municipales no alcanzan para solucionar la problemática que existe en el municipio”, acotó la mandataria, Andrea Ovalle.
Como solución, le manifestó a la comunidad Yukpa conformar una delegación que los represente en la firma de un nuevo compromiso, esta vez para la entrega de los recursos; el documento estaría sellado por el ministerio público conformado por defensoría de etnias, delegados del departamento del Cesar, personero municipal y alcaldesa, y el acto, tendría lugar en la iglesia municipal San Francisco de Asís, con la presencia del presbítero de esta parroquia.
PERSONERÍA MUNICIPAL
Por su parte, el personero municipal de La Paz, Cesar, Samuel Francisco Figueroa, aseguró que no son “caprichos” los exigidos por parte de la comunidad sino indiscutiblemente sus derecho, pero dijo que “este es un problema del abandono Estatal colombiano y no del gobierno administrativo”.
LO QUE DICE LA COMUNIDAD
DIARIO DEL CESAR también conoció las opiniones de distintos miembros de la comunidad yukpa que bloquearon el acceso a la Alcaldía Municipal con flechas, fogatas y una barrera humana. Ellos insisten estar “abandonados” por parte de la administración municipal ‘Motivos para Creer’.
Orlando Ovalle, indígena yukpa, comentó que “hace tres años que la Alcaldesa de La Paz se comprometió con los resguardos para colocar la electrificación, pero por parte de ella no hemos recibido ningún confite. Hemos esperado para ver si ella se pone la mano en el pecho porque toda la gente votó por ella”, dijo.
Rubilda Suárez, perteneciente a la etnia yukpa, expresó que, “la electrificación que se comprometió a instaurar la señora alcaldesa no la hemos recibido. Los niños necesitan internet para tareas, y no tenemos el servicio”.
Marina Ovalle, dijo que: “me encuentro afectada por el abandono de la administración, pero mas están los niños. Duermen sin luz, no pueden ir al colegio. Necesitamos ayudas”, concluyó.