No existen evidencias sobre muertes de niños indígenas en la Sierra Nevada
POR NINOSKA REYES URDANETA
Recientemente líderes indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta manifestaron su preocupación por la muerte de siete menores de la etnia wiwa y kogui en las últimas semanas, por cuenta de enfermedades respiratorias, situación que de inmediato fue abordada por las autoridades de salud que atienden a la población indígena, las cuales aseguran que hasta la fecha no existen evidencias científicas sobre los referidos decesos.
Esta situación se estaría presentando en una zona conocida como el Barcino, en la jurisdicción del municipio de San Juan del Cesar.
“Son siete los menores de edad que han muerto por estas patologías y sobre todo por la falta de injerencia de las instituciones en salud; hay un brote que está afectando a los indígenas de por lo menos siete comunidades wiwas y kogui”, denunció Paulo Loperena Daza, líder indígena, quien agregó que adultos mayores, entre Mamos y autoridades ancestrales y mujeres embarazadas, también presentan sintomatología infecciosa similar.
Ante este panorama, Edgar Mendoza, gerente de Dusakawi IPS, indicó que hasta el momento no tienen evidencias técnico científicas que indiquen cuántos niños han fallecido en la referida población.
En la Sierra Nevada existe una problemática general, las poblaciones que están muy arriba, son netamente tradicionales y se rigen culturalmente por la medicina ancestral. Durante este año, se ha tenido el intento de subir en varias ocasiones, pero por circunstancias de la misma tradición indígena, las autoridades y Mamos, no han permitido la subida de los equipos médicos, ni tampoco autorizan los traslados de las personas enfermas a un centro de salud.
“Recientemente el equipo médico de la IPS requirió la remisión de algunos pacientes hacia la ciudad para recibir la atención. Se les explicó sobre la necesidad de la intervención médica y no lo permitieron, porque se estaba cumpliendo con un ciclo de atención tradicional”, explicó.
Esta problemática, además de la población wiwa, también se ve reflejada en los arhuacos, kankuamos y kogui.
Yelitza Coronel, coordinadora y epidemióloga de Dusakawi IPS, indicó que es de suma preocupación lo que está sucediendo en la Sierra Nevada de Santa Marta. “Es necesario verificar en campo para determinar la veracidad de las muertes que están denunciando los líderes indígenas, ya que no hay ninguna información reportada al Sistema de Vigilancia Nacional”.
Sin embargo, una vez conocida la situación, se envió un enfermero que está en campo y se espera por la autorización, de los líderes indígenas, para subir un equipo médico. Se estima que el lunes se dé el traslado, ya que anunciaron que están terminando los rituales por la muerte de uno de los Mamos de la zona.
Destacó que entre los días 24 y 27 de julio, se llevó a cabo una jornada médica en la comunidad del Barcino, donde se atendieron 112 personas, de las cuales el 42% era población no afiliada, pero igual recibieron asistencia en salud.
Un total de cinco niños fueron encontrados con una sintomatología respiratoria que ameritaba ser remitidos, pero los líderes y familiares no autorizaron el traslado a un centro de salud, por sus creencias y tradiciones aún cuando se requería de una contrareferencia a una institución de mayor complejidad.
“Este es uno de los problemas que se presentan para llevarles la asistencia, además de lo difícil que es llegar a esas comunidades, porque la accesibilidad geográfica es complicada y se requieren mulas para el equipo médico y seis horas de transporte por vías no habilitadas para el tránsito”, explicó.
Es una población totalmente vulnerable, sin acceso a una alimentación saludable, sin agua potable ni las condiciones mínimas para garantizar una vida digna. Muchos de los niños tampoco tienen identidad y eso dificulta aún más la afiliación de los servicios de salud y formar parte de los programas de atención a nivel nacional.
Otra de las quejas presentadas en los últimos días, fue la muerte de un Mamo luego de participar en varias actividades del Cabildo de Gobernadores, a lo que respondió la epidemióloga, que según la información recaudada, se trató de un derrame cerebral presentando parálisis en parte del cuerpo y la cara.
Se les reiteró la necesidad de una atención médica especializada, pero se negaron. Se les facilitó el transporte y fueron renuentes, porque la indicaciones de las autoridades indígenas, era cumplir con el ciclo de la atención médica tradicional.
Indicó Coronel que se han presentado casos de niños que han tenido accidentes en territorio indígena y lamentablemente los padres y líderes impiden trasladados, prefieren firman un documento de renuencia, por medio del cual se hacen responsables de su atención a través de la medicina tradicional, posición que la IPS respeta por tratarse de población indígena. Cuando este tipo de casos se presentan, se elabora un informe al ICBF y ellos hacen la intervención.
ASI ES SU ATENCIÓN
Evangelista Conchangue Moscote, gestor de medicina tradicional, explicó que en las comunidades indígenas inicialmente se trabajaba con la naturaleza, con la madre tierra. Primero se consulta con el sabedor ancestral que es el Mamo, quien analiza el caso espiritualmente y decide si es necesaria la remisión a la medicina occidental.
“Manejamos plantas medicinales, materiales propios para nuestra defensa. Recientemente se presentó la muerte de un Mamo, pero hasta ahora no se han determinado las causas por ninguna de las dos medicinas. Recibió el tratamiento natural y aunque se hicieron todos los esfuerzos falleció”, dijo.