Una tragedia que mató los sueños a un estudiante de comunicación social
Lograr ingresar a una universidad y recibir el título como profesional, es lo que cientos de jóvenes oriundos del municipio de Becerril (Cesar) desean. Y es lo que precisamente hizo un joven, soñó y estudió para superarse, pero las balas le arrebataron la vida en el municipio de Ocaña (Norte de Santander).
Se trata de Kevin Danilo Rojas Rubio, quien desde muy niño se mostró como uno de los mejores estudiantes del colegio de Becerril, allí recibió felicitaciones y ese destacaba en cada materia; siempre quería surgir, pues deseaba ser un comunicador social de prestigio y se esforzó para estudiar la carrera.
Este joven universitario logró inscribirse en la Universidad Francisco de Paula Santander del municipio de Ocaña, desde allí comenzaron sus ilusiones por darle lo mejor a su hija y a su compañera sentimental.
“Kevin Rojas Rubio, estudiante que venía desde Becerril a profesionalizarse, cuya característica principal era la jovialidad, cursaba conmigo la asignatura tecnología de la comunicación. Recuerdo que era muy amable, decente, respetuoso y es triste todo esto, en el Plan de Estudios de Comunicación Social, la tristeza nos sigue”, expresó el magíster de dicha institución, Jairo Barbosa Trigos.
Era la madrugada del 9 de diciembre de 2019. El joven de 26 años, natural del municipio de Becerril, centro del Cesar, se encontraba las afueras de una discoteca ubicada en la avenida Francisco Fernández de Contreras, del municipio de Ocaña, (Norte de Santander), allí recibió varios impactos a la altura de la cabeza y el tórax. Esto según el relato de las autoridades quienes señalaron que inicialmente se presentó una riña al interior de una discoteca y luego una de las personas involucradas en el hecho, regresó con tres más a bordo de motocicletas quienes dispararon en repetidas ocasiones contra el grupo de personas que se encontraban en las afueras, dos mujeres y seis hombres.
De la riña que terminó en tragedia, el médico José Vergel del hospital Emiro Quintero Cañizares, dijo que: “Llegaron nueve pacientes heridos a la sección de urgencias, con heridas de arma de fuego a nivel de tórax, abdomen, miembros superiores e inferiores. Uno de estos pacientes llegó sin signos vitales, adelantamos maniobras de reanimación, esto no se logra y el paciente fallece”.
En los hechos resultaron heridos: Stefany Daniela Contreras Peñaranda, de 24 años; Yeltsin Eduardo Peña Angarita, de 28 años; Yineth Paola Rincón Claro, de 19 años; Cristian Camilo Marqués Contreras, de 22 años; Luis Fernando Contreras Moreno, de 23 años; Juan Camilo Argote Díaz, de 29 años; Nicolás Barbosa Quintero, de 24 años, y Andrés Eduardo Zuleta Rodríguez, de 24 años.
La noticia ese 9 de diciembre de 2019 sobre la muerte de Kevin Danilo Rojas Rubio se regó como pólvora también en el municipio de Becerril (Cesar).
Natalia Hernández, estudiante de derecho y compañera del joven universitario cesarense, en medio del dolor y rechazo, explicó que con la víctima sostenían una relación de la que queda una hija de tres años, Lusiana, quien infortunadamente por este hecho quedó huérfana de padre.
“Era un muchacho que estudiaba Comunicación Social de la UFPS, quería graduarse rápido, quería salir pronto de su universidad para darle todo lo que le prometió a mi hija”. “Él quería hacerla feliz, como me lo decía, siempre me advertía que la amaba mucho. No sabemos porque pasan estas cosas en Ocaña”, destacó Hernández de su compañero con el que compartió, sus ganas de superación de salir adelante, era amoroso, comprometido con su educación y con la familia. Y en medio de la tristeza manifestó recordando lo que había ocurrido. “Él estaba con un grupo de amigos y se fueron a mirar la pelea y terminó en esta tragedia, donde un hombre que había tenido una pelea en el lugar regresó y en esas circunstancias mató a Kevin”, contó.
La muerte de Kevin Rojas entristeció a los estudiantes de la Ufps de Ocaña, pues a él lo admiraban porque siempre demostrada el amor por sus estudios y por su familia, prometía darle lo mejor a su hija.
En su momento, el Director de la mencionada institución, el magíster Édgar Antonio Sánchez Ortiz, se pronunció ante este hecho indicando que: “Es lamentable estas situaciones violentas, donde se ven involucrados estudiantes de la institución y ciudadanos en general, porque esto es una muestra de intolerancia. La Ufps Ocaña espera que se aclaren estos hechos y se generen condiciones de mayor control a estas situaciones, para prevenir sucesos como el ocurrido. La Universidad lamenta profundamente este tipo de actos. Kevin como otros jóvenes provenientes del Cesar y Sur de Bolívar, llegan con expectativas de crecimiento personal, laboral y encuentra en la Universidad la mano que se les extiende para su proceso de formación, lamentable que sus sueños se vean truncados por la violencia”.
El cuerpo de Kevin Danilo Rojas Rubio fue llevado a su tierra natal para ser sepultado, sin embargo los moradores de Becerril solo exigían justicia y esperaban que las autoridades capturaran a los asesinos.
Tan solo pasaron algunas semanas para que peritos judiciales en Ocaña dieran con la aprehensión de tres sujetos, quienes eran señalados como los determinadores de la muerte del universitario. Fueron ellos: Luis Alfonso León García es natural de Hacarí, tiene 23 años de edad y sería cabecilla urbano de ‘Los Pelusos’ en Ocaña y responsable de ordenar y coordinar los hechos delictivos en la ciudad.
Deiver Alfonso Barbosa Barbosa, oriundo de Hacarí, tiene 20 años de edad y sería el cabecilla logístico de este grupo armado ilegal en Ocaña, Ábrego y La Playa; y finalmente Cristo Humberto Ascanio Vacca es natural de La Playa de Belén, tiene 25 años de edad y sería el segundo al mando en Ocaña.
Aunque han pasado ya tres meses de la muerte del estudiante de comunicación social, amigos y compañeros de estudios aún lamentan lo sucedió y, su familia, aún espera que se haga justicia por este hecho, aunque esto no remedie el dolor que la embarga.
“Él era dedicado, era promesa de las comunicaciones. La justicia existe, y hay algunos sujetos capturados. Kevin era una gran persona, un gran padre, aún recordamos ese día de la tragedia”, explicó un estudiante de la Ufps de Ocaña.