Cartera morosa por más de $ 76 mil millones está en el riesgo de ´perderse´

POR:
NINOSKA
REYES URDANETA

‘Pobre hospital’, así fue catalogado el Rosario Pumarejo de López, durante un debate de control político realizado en la Asamblea Departamental, cuyo objetivo fue realizar una radiografía de la situación que en materia de salud atraviesa el Cesar.

Este centro de salud tiene casi 50.000 millones de pesos en riesgo de perder por las EPS liquidadas y las que están en proceso de desaparecer, mientras que casi $26.000 millones corresponde a la atención de migrantes venezolanos; además de tener en cartera por cobrar de $108.000 millones. Recauda 35% menos de lo que gasta cada año.

Pero las preguntas son ¿Está el hospital en riesgo financiero, podrá salvarse de la crisis que enfrenta? Solo hay dos alternativas, agotar todas las gestiones de cobro, porque la deuda no supera lo pendiente en cartera, o buscar soluciones del orden nacional como los acuerdos con la Ley de Punto Final.

El debate de control político fue propuesto por los diputados Jesús Suárez y Claudia Margarita Zuleta, para el cual se contó con la presencia del secretario de Salud Departamental, Hernán Baquero, el gerente del Hospital Rosario Pumarejo de López, Armando Almeida y el coordinador del CRUE, René Urón Pinto; siendo los grandes ausentes los representante de las Entidades Promotoras de Salud (EPS). El debate se extendió por más de cuatro horas.

De acuerdo al diagnóstico presentado por el gerente del Rosario Pumarejo de López, Armando Almeida, el estado contable de las EPS liquidadas como Solsalud, Saludcoop, Golden Group Fonsat, Humana Vivir, Selvasalud, Cajasan, Comfama, Saludcondor, Famisalud Comfanorteb EPS.S, es de $22.536.813.290, de los cuales se recuperan 1.000 millones de pesos. Sin embargo, el hospital tiene $19.621.851.039 perdidos por este concepto.

“Cuando llegué a administrar este centro de salud, se tenían más de 13.559 millones de pesos perdidos con Caprecom, pero se logró recuperarlos a través de un litigio y durante un periodo de tres años. En el año 2017 cancelaron $4.676.869.537 millones, en el 2018 $4.538.384.756, y en el 2019 $3.018.357.215, recursos que prácticamente estaban perdidos”, dijo.

Sobre las EPS que están en proceso de liquidación es otro de los problemas que están en estos momentos colocando al hospital en un grave riesgo. En el 2019 se liquidaron las empresas Cafesalud, Cruz Blanca, Comfacor, Manexka, Emdisalud y Salud Vida, las cuales reportan una facturación de $28.977.234.033.

Explicó el funcionario que inicialmente se había hecho una conciliación de cartera de alrededor de 15.000 millones de pesos y hasta la fecha no se ha podido suscribir un nuevo acuerdo.

“Esto quiere decir que por esta parte el Hospital Rosario Pumarejo de López tiene en riesgo de perder casi 50.000 millones de pesos, solo en empresas liquidadas; siendo el problema más grave, el destino de los más de 163.000 usuarios”, dijo.

ATENCIÓN A EXTRANJEROS: EL GRAN PROBLEMA

Almeida destacó que aunque el Hospital Rosario Pumarejo de López no está en riesgo financiero, su situación es crítica.

En cuanto a la atención de población extranjera en área de urgencias, entre los años 2017 y 2019 se gastaron $13.711.834.426, mientras que en hospitalización $12.220.415.709 para un total de $25.932.250.045, los cuales también están en riesgo de perderse. Esta cifra representa lo que el hospital puede gastarse en cinco meses, si se toma en cuenta que su estimado de egresos al mes es de 5.300 millones de pesos aproximadamente.

“La institución ha tenido que asumir la atención a los migrantes venezolanos a costa del sacrificio del funcionario y de los proveedores. Entre el 2017-2019 se facturaron más de 31.000 millones de pesos, de los cuales solo han pagado al hospital $4.774 millones por esta concepto”.

Detalló que el Gobierno, por razones humanitarias ordena atender a los ciudadanos del vecino país, pero solo para temas de urgencia, sin embargo, se atiende el área de hospitalización aún sin contar con los recursos, y una muestra de ellos es que hasta ahora no se han podido radicar más de 12.200 millones de pesos por esta concepto porque el Gobierno nacional no tiene presupuesto.

El Rosario Pumarejo de López recibe a diario entre 3 y 4 tutelas por atención a migrantes, problemas grave y difícil de afrontar. Las mujeres embarazadas son las que más abultan la sala de parto en el centro de salud, aunado a las complicaciones que presentan por ser en su mayoría menores de edad, o no contaron con el control prenatal, por lo que generan un grave problema epidemiológico al departamento.

PROCESOS JUDICIALES

Por otra parte, Almeida indicó que otro de los graves inconvenientes son los 297 procesos judiciales que enfrenta el hospital, de los cuales 130 son por fallas médicas, 62 por personas despedidas sin justa causa, 35 procesos por cobro de facturas de proveedores, sumando un total de $77.054.657.014 pesos, de los cuales 66.107.523.941 son por fallas médicas.

En cuanto a la deuda con el personal hasta el 31 de diciembre de 2019 superaban los 29.000 millones de pesos, incrementándose hasta la fecha a $43.000 millones.

Hasta el año pasado el estado de la cartera de la Secretaría de Salud es de $32.169.167.534, de los cuales el 50% corresponde a la atención de la población pobre no asegurada y el esto a la facturación de asistencia a venezolanos. Están pendientes por radicar $11.057.910.508.

Con todo este panorama, Almeida explicó que por razones de norma, el hospital Rosario Pumarejo de López no está en riesgo financiero, siendo una de las grandes alternativas la Ley de Punto Final, ya que en la medida en que le vayan a pagar a las EPS o los no POS, se comprometan ellas a responderle al hospital.

Otra de las causas por las que no se puede declarar en riesgo financiero, es que la deuda no supera lo acumulado en cartera, por lo que hay que abortar todas las gestiones de cobro antes de tomar este tipo de medidas.

 ‘SI ESO NO ES ESTAR EN RIESGO FINANCIERO, ¿QUÉ ES?’

Claudia Margarita Zuleta, diputada de la Asamblea Departamental, destacó que quejándose de las EPS no se va a solucionar el problema porque es el modelo de salud que existe en Colombia y hay que adaptarse.

El modelo indica que la EPS deben ser sostenibles, por lo que hay que crear las estrategias para tal fin. El Hospital Rosario Pumarejo de López no puede sostener su operación corriente, recauda el 35% menos de lo que se gasta cada año, siendo una referencia en el año 2019 cuando se gastó 104.000 millones de pesos y solo recauda $68.000 millones, es decir, casi 40.000 millones de déficit.

“La cartera del hospital tiene deudas que suman $108.000 millones, de los cuales una parte está en riesgo de no ser recuperada y se le suman los 32.000 millones de peso que debe la Secretaría de Salud Departamental; esto quiere decir que la cartera que respaldan los balances del centro de salud, una parte muy importante que se puede acercar al 70% es de difícil recaudo”.

La diputada destacó que aunque la resolución del Ministerio de Salud indique por vía de esta cartera, que el Hospital Rosario Pumarejo de López no está en riego financiero, “ustedes y yo con la mano en el corazón, debemos decir que sí lo está, porque no tiene como sustentar su operación corriente y tiene una cartera de dudoso recaudo”.

Con respecto a los pasivos del hospital, se tienen 79.000 millones de pesos reconocidos en pasivos con cierre del 31 de diciembre de 2019, de esos el 45% son provisiones, 26.000 millones aproximadamente. En este rango $31.748 millones son para pagar demandas. “Si eso no es estar en riesgo financiero, qué es?

‘Pobre hospital’, su potencial son sus usuarios, sus proveedores y sus trabajadores, a quienes no se les puede seguir poniendo en sus hombros las deficiencias del hospital, hay que responderle a sus empleados y tratarlos con dignidad.

Zuleta ante semejante crisis que enfrenta el centro de salud, considera que el Rosario Pumarejo debe hacer un esfuerzo operacional y ajustar sus ingresos a sus costos de operaciones a los ingresos. Igualmente el esfuerzo de recaudación de cartera, poniendo especial atención en la Secretaría de Salud que es el mayor deudor después de las EPS, y que en los últimos cuatro años solo giró 12.000 millones de pesos.

“Pienso que la única alternativa que tienen es la Ley de Punto Final del Plan Nacional de Desarrollo, pero para llegar allá, la Secretaría de Salud y el hospital deben hacer la depuración de sus cartera que en su mayoría no lo está. Aquí hay que aplicar una estrategia express de depuración de deudores y poderlo presentar al acuerdo de Punto Final con el financiamiento del Gobierno Departamental, antes del mes de junio que es el plazo estipulado”, explicó Zuleta.

Al Hospital Rosario Pumarejo de López hay que inyectarle los recursos que se necesitan para poder subsidiar esos altos pasivos, y poder quedar en una situación óptima para seguir operando. “Me preocupa que pretendan que el hospital sea uno más, de la cadena sistemática de tercerización que se viene proponiendo desde el Gobierno Departamental con entregar los hospitales públicos a la red privada”, afirmó.

Finalizó exhortando a las autoridades a tomar decisiones, no solo es quejarse de las EPS, hay que promover la fiscalización y el control. Igualmente es necesario cerrarle las puertas a las demandas y para eso hay vías, por ejemplo, la Ley 550.

DISPUESTOS A CONCILIAR

Hernán Baquero, secretario de Salud Departamental, indicó por su parte, que al Hospital Rosario Pumarejo de López, la Secretaría de Salud le tiene pendientes algunos compromisos, pero las cifras anunciadas no son las reales. “Una cosa es lo que se radica y otra, lo que termina siendo auditando, ya que si la cuenta de cobro no tiene los lineamientos exigidos o no hay pertinencia médica, será devuelta”, dijo.

Sin embargo, manifestó que se fijó el compromiso de depurar la cartera, estudiar estrategias de acción y verificar el monto real de la deuda. También se iniciarán cesiones de crédito al momento de hacer los contratos con la EPS, para que una vez cancele la Secretaría de Salud, el hospital reciba sus recursos.

Otro aspecto importante es la Ley Punto Final, a través de la cual se pueden lograr muchos beneficios y por los cuales se trabajará en los próximos días.