Diario del Cesar
Defiende la región

Reconversión laboral de carromuleros fue ´pura paja´

301

El animal fue revisado por un médico veterinario que pasaba por el lugar. Mostró síntomas de desnutrición, lesiones en una de sus patas y en el lomo.

POR:
NINOSKA

REYES URDANETASon seres simples, tranquilos y muy leales; siempre pondrán su otra mejilla, pero sus cualidades no dan cabida al maltrato que a diario son sometidos. Por segunda vez durante este año, en Valledupar se registró un nuevo caso de maltrato a los caballos que utilizan como carromuleros para transportar cargas. Ayer en horas de la mañana en la avenida Sierra Nevada, un caballo cayó desplomado sobre un alcantarillado por cansancio o debilidad.

Eran las 11:00 de la mañana, cuando el animal transportaba una pesada carreta de madera con material reciclable. Su propietaria lo comandaba ante el inclemente sol y el bulloso tránsito de la ciudad, pero sus fuerzas llegaron hasta el paso por una alcantarilla fluvial, donde se estima resbaló y su pata se atascó en una de las rejillas.

Momentos de angustia se vivieron los transeúntes, quienes de inmediato llamaron a los agentes de la Policía para actuar, mientras con los mismos cartones que transportaba el animal, lo protegieron del sol.

De acuerdo a lo expresado por las personas que se encontraban en el lugar del hecho, el animal mostraba debilidad, signos de mala alimentación y estaba agobiado por el trabajo; por una hora aproximadamente, permaneció tendido en el pavimento, hasta que los ciudadanos que lo auxiliaron, lograron levantarlo. Al sitio intentó llegar una unidad de rescate del Cuerpo de Bomberos de Valledupar, pero la propietaria del animal se mostró alterada e impidió el procedimiento.

Sin embrago, el animal fue confiscado por la Policía y está en su poder mientras recibe atención veterinaria, ya que presenta maltrato en su lomo y lesión en una de sus patas.

Nazly Contreras, miembro de la Fundación Huellitas Callejeras, informó que el animal no llevaba herraduras en sus patas y eso le impidió pasar el alcantarillado, que aunado al cansancio y la debilidad, propiciaron el triste momento.

El caballo presenta el lomo todo despellejado, tienen ampollas y es evidente los efectos que ha sufrido por las cargas que a diario transporta. “Lo lamentable de esto, es que estos casos pueden ser penalizados por la Ley 1774 de 2016, pero cuando la Policía lleva el caso a un juez, este da la libertad al acusado y el animal vuelve a sus manos. No hay justicia para los animales”, dijo.

SIETE CASOS

Por otra parte, Contreras informó que la fundación registra siete casos de maltratos a caballos en los que va de año en Valledupar. Unos por desnutrición, tres han caído en cunetas y otros habían sido alquilados para transportar pesadas cargas por largos trayectos.

Este tipo de situaciones evidencian que los animales en Valledupar no tienen dolientes. Muchos son sometidos al maltrato sin que nadie los atienda, su mirada lo dicen todo, pero su nobleza supera el dolor provocado por la mano del hombre.

NO HAY VOLUNTAD POLÍTICA

La animalista María Margarita Lopesierra, manifestó que ayer fue radicado un derecho de petición al Gobierno Municipal saliente sobre la creación del centro de bienestar animal, ya que hasta la fecha no se ha recibido respuesta y “estamos cansados de tantos maltratos a los caballos, perros y gatos”.

Lopesierra destacó que en muchos casos, además de utilizaron para transportar carga, a los caballos y cualquier tipo de animales son envenados y golpeados con frecuencia.

No se cumplen la Ley 1774, ni el Código de Policía en el municipio. Resaltó por otro lado que en la actualidad las fundaciones de animalistas en la ciudad tienen el reporte de cuatro casos de tumor venéreo transmisible (TVT), por no esterilizar los perros y esto se trasmite a toda la población  canina.

PROYECTO SIN RESPUESTA

Recordó Lopesierra que las fundaciones y rescatistas de Valledupar presentaron al Gobierno local el proyecto de Política Pública de Protección y Bienestar Animal en fundamento legal de la Ley 1774 de 2016 que castiga el maltrato; además de la Ley 1801 de 2016 por el cual se expide el Código Nacional de Policía y Convivencia; la Ley 769 de 2002 y demás normas concordantes.

En este sentido, y al hacer referencia a la protección de los caballos, el proyecto en su artículo 19 establece medidas para los vehículos de tracción animal. “… corresponde a las entidades del Municipio competentes dar aplicación a lo contemplado en la Ley 769 de 2002, la Sentencia C-355 de 2003, en lo concerniente a un Plan Integral Alternativo y Sustitutivo para los conductores de vehículos de tracción animal. La Administración municipal de Valledupar dará estricto cumplimiento a lo dispuesto en el decreto nacional 1666 de 2010 para la sustitución laboral de los vehículos de tracción animal”.

Sin embargo, las fundaciones siguen a la espera de una respuesta que aspiran recibir de la nueva Administración Municipal y Departamental.

RECONVERSIÓN FRACASADA

Por medio del Decreto 178 de 2012, el Gobierno autorizó la sustitución de vehículos de tracción animal por vehículos automotores. Actualmente existen censados por la Alcaldía de Valledupar 343 carromuleros, de los cuales solo 20 han sido reconvertidos tal como lo indica la sentencia  355 del 2003 de la Corte Constitucional.

Cuarenta fueron capacitados en el 2017 y 27 beneficiarios de los carros, lo que indica que el proceso la reconversión laboral, que inició hace siete años, va a pasos muy lentos.

En septiembre del 2018, el alcalde, Augusto Ramírez Uhía, prometió que antes de los primeros cuatro meses del 2019 se les haría entrega de 15 carros y 15 apoyos a negocios a otros 30 beneficiados, pero no cumplieron con el compromiso, informó José Calderón, presidente de la Asociación de carromuleros de Valledupar (Asocarv).

Durante la conversación, Calderón comentó que aunque es la única forma de ganarse la vida, la reconversión ha sido lenta.  Las razones aparentemente expresadas por la administración municipal, es que al parecer, hay problemas con la Ley 550 del municipio, encargada de la reactivación empresarial.  Se cree que existen limitantes en los recursos económicos para el proceso.

Un caso similar al presentado ayer, ocurrió el 1° de noviembre de este año frente del conjunto cerrado Rosario Norte, donde funcionarios del Cuerpo de Bomberos de Valledupar, rescataron un caballo cuyas patas, quedaron atrapadas en la rejilla  de una alcantarilla, en el momento que arrastraba una carreta junto a su propietario.

La operación de rescate duró entre 15 y 20 minutos, finalmente el animal fue entregado a su propietario por parte de agentes de la Policía. El animal alcanzó a sufrir laceraciones, debido a los intentos que hizo por liberarse al momento de quedar estancado.