Diario del Cesar
Defiende la región

Homicida de limpiavidrios dice que actuó en defensa propia

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Como Miguel Ángel Angarita Arrieta, de 18 años, fue identificado el joven que de manera voluntaria se presentó ante el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, de la Fiscalía, asegurando ser quien el pasado domingo le propinó la herida que le costó la vida al limpiavidrios Estiven Elías Barros Salinas, de la misma edad.

Explicando que no se trató de una venganza, como se había mencionado preliminarmente por los investigadores judiciales, el joven manifestó que todo se trató de un acto de legítima defensa pero que nunca tuvo la intención de asesinar a su coetáneo.

“Yo me defendí del muchacho Estiven, porque meses atrás había tenido problemas con él. Lo que pasó ahora fue que yo estaba bebiendo y me iba para mi casa a dormir y cuando iba llegando, él iba pasando. Me frenó, empezó a hablarme y a recordarme lo que había pasado; yo le dije que dejara eso así, que yo sabía que lo había cacheteado pero que no quería problemas y él me respondió que lo tenía con rabia y ofendido, entonces me agredió a trompadas y yo me defendí con un cuchillo que tenía y le propiné la puñalada”, contó el indiciado.

Sobre el altercado que antecedió a la riña que le causó la muerte al adolescente oriundo de Codazzi, señaló que ocurrió meses atrás en la Urbanización Lorenzo Morales, ubicada al sur de la ciudad, por una gorra.

“Él hizo correr a unos amigos míos, eso fue un problema de pelados y esa vez yo le pegué una cachetada. Ni nos conocíamos ni éramos amigos, solo habíamos tenido ese problema. A los familiares les quiero aclarar que yo lo apuñalé fue por defenderme y en ningún momento quise quitarle la vida, incluso yo mismo lo auxilié, lo monté en una moto y todo. Por eso estoy presentándome hasta la justicia”, dijo Angarita Arrieta, quien aseguró que sus parientes han sido amenazados por los allegados del hoy occiso.

Dado que no fue capturado en situación de flagrancia y en su contra no pesa ningún requerimiento judicial, el confeso asesino no fue detenido ni procesado por la justicia. Sin embargo, será vinculado al proceso investigativo que se adelanta por el caso de homicidio.

“La sociedad vallenata le agradece al joven por presentarse a esclarecer los hechos que hoy enlutan a una familia y de los que se requiere conocer los motivos por los que se dio. El mismo domingo él se presentó voluntariamente a la URI con la disposición de someterse a la justicia y aclarar el caso, que es materia de investigación. Ahora estamos a la espera de que se fije una fecha para realizar la audiencia de imputación ya que no existe una orden de captura. Sin embargo, el joven en todo momento ha estado en disposición de atender el requerimiento de la justicia”, explicó su abogado, Luis Alfonso Freite.

EL CASO

Estiven Elías Barros Salinas falleció poco después de ser sometido a una cirugía por los galenos del hospital Rosario Pumarejo de López, debido a los graves daños que le dejó la herida de arma blanca que recibió en la pierna izquierda, sobre la región inguinal, por el grave compromiso que tuvo la arteria femoral.

De acuerdo a lo indicado por las autoridades, el episodio se registró en la calle 17B con carrera 36 del barrio La Victoria, situado al suroccidente de esta capital, en circunstancias que son materia de investigación.

Sin embargo, la madre de la víctima, Adalgisa Salinas, señaló que él fue agredido sin compasión por un joven que se aprovechó de un descuido de su hijo para causarle la muerte, aparentemente motivado por una discordia que habían sostenido con anterioridad.

“Él estaba bebiendo en el patio de la casa de un amigo y me dijeron que había salido para la tienda a comprar un cigarrillo. Allá estaba el muchacho esperándolo porque ellos como que ya habían tenido una riña y por eso estaba ahí en la tienda y lo levantó a puñal. A mí me habían dicho que mi hijo había tenido problemas con ese muchacho, no sé por qué”, contó la fémina.

Sobre el fallecido se conoció que vivía con su progenitora en la invasión La Fe, ubicada cerca del sitio donde fue atacado; hacía pocos días se había separado de su mujer, a quien dejó embarazada y se ganaba la vida limpiando vidrios de los carros que transitan por los semáforos de la avenida Fundación.

Además, era el menor entre tres hermanos y será sepultado por sus seres queridos en medio de una celebración religiosa que se llevará a cabo en el municipio de Codazzi, de donde era oriundo.