Homenaje de la Universidad de Antioquia a la investigadora  del vallenato, Marina Quintero

Por WILLIAM ROSADO RINCONES

Marina Quintero es una mujer nacida en Ocaña y residente en Medellín aunque su verdadero hábitat espiritual es Valledupar, es una enamorada de la música vallenata y de los juglares de la provincia. Más de la mitad de su vida la ha dedicado a estudiar el folclor vallenato, es una experta conferencista, versada en estas lides, y una inapelable  asistente a los festivales vallenatos.

Pero no solo aplica sus conocimientos en la teoría, en la práctica ha demostrado que tiene afinidad para cantar, no solo en los momentos de esparcimientos y descanso, sino a nivel de grabaciones, por lo que registra varias producciones musicales. Gracias a su amistad con el profesor José Atuesta Mindiola, se ha convertido en su vocalista de cabecera, y es común escuchar su voz en los temas de este poeta, tales como: ‘Décimas a Diomedes’, ‘En este pueblo se canta, y ‘La misión del cantor’, este último, está sonando en las emisoras de Valledupar.

Su vida está relacionada con los aeropuertos y los auditorios, viaja constantemente a donde quiera que se haga referencia al vallenato, en esos escenarios es común encontrar la sensatez de sus exposiciones, donde manifiesta el sentir de un folclor que le taladró el sentimiento, a tal punto de darse el lujo de tener más repertorio que muchos de los nativos del Valle del Cacique Upar.

Esta dama del vallenato es una reconocida docente de la Universidad de Antioquia en donde la cátedra vallenata es más sonora que la propia trova antioqueña, su pasión es: enseñar e investigar.

Todo ese palmarés le ha merecido muchísimos reconocimientos a nivel nacional. Son 40 años de trasegar por los pasillos de la juglaría, sin demeritar su conocimiento en los perfiles de las nuevas generaciones. Parte de esos conocimientos, se iniciaron en su adolescencia cuando tuvo contacto directo con Calixto Ochoa Campos,  un gran maestro de la música, un juglar entregado a la sencillez y quien no escatimaba voluntad para dar la mano a las nacientes figuras, por eso le permitió a Marina , grabar sus primeros temas relacionados con el vallenato.

Sus tacones son simbólicos ante su altura cultural, en esta oportunidad otro homenaje se rinde a sus pies, otra vez, sale a flote el reconocimiento a su obra artística, cultural y pedagógica. Es por demás una gran escritora en donde cada trazo refleja la nota de un acordeón, en su haber se registran: artículos, libros, producciones musicales y la radio, todos esos canales confluyen en un solo propósito: la defensa del vallenato raizal.

“La profesora Quintero merece ser reconocida como la mujer que canta, cuenta y siente el vallenato, la mujer que lucha y protege el patrimonio cultural” dicen los oferentes, por eso, hoy se le hace un reconocimiento  a su experiencia y conocimientos en un acto que se cumplirá en el auditorio universitario Camilo Torres Restrepo  de la Universidad de Antioquia. Esta velada en honor a Marina Quintero contará con la presentación de la Banda Sinfónica Universidad de Antioquia.

Marina Quintero, quien además es la directora del programa ‘Una voz y un acordeón’ de la emisora cultural de la Universidad de Antioquia, es tan celosa con la pureza del vallenato, que ha reclamado siempre el reconocimiento a muchos juglares que han pasado escondidos en la historia, mientras que el ‘boom’ mediático, arropa a otros que sin tener esas ‘charreteras’ se roban la publicidad, así lo reclamó  cuando el Festival de la Leyenda Vallenata , propuso homenajear a Carlos Vives, en la versión 51, ella sin desconocer la grandeza de Vives, pidió mirar más atrás en aquellos renglones donde reposan nombreS de generaciones pasadas.

Pero esta rebeldía de Marina, no ha sido óbice para deteriorar las relaciones que mantiene con los directivos de la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata, la que precisamente, este año exaltó su aporte en la salvaguarda del vallenato al lado de otras figuras como: Daniel Samper Pizano y Pilar Tafur.