Diario del Cesar
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El difícil camino de ser pobre y mujer en el país

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En un almacén de cadena una caja de 30 toallas higiénicas vale, en promedio, 18.000 pesos, mientras que un kilo de arroz puede costar hasta 3.000 pesos.

Esa comparación, en Colombia y el mundo, es una realidad que enfrentan por lo menos 250 millones de mujeres, según la Organización de las Naciones Unidas, que cada que llega su periodo menstrual deben decidir entre adquirir el producto para satisfacer su necesidad sanitaria o compran algo de comer para ellas o sus familias.

A esta conclusión llega la Fundación Plan (organización que trabaja en la promoción de los derechos de la niñez), que presentó un informe en el que concluye que de cinco de cada 10 mujeres de zonas vulnerables, como Tumaco, Jamundí, Cartagena, Buenaventura y Chocó, no tienen acceso a productos de protección sanitaria para la menstruación.

El panorama mundial es aún más crítico. De acuerdo con el reporte de la misma organización, una de cada 10 mujeres de zonas vulnerables viven sin acceso a estos.

¿Qué implica?

Ximena Norato, directora de la Agencia Pandi (organización que vela por los derechos de la niñez), el negar o tener barreras en el acceso a sus derechos, como no tener toallas higiénicas, trae consecuencias para ellas, por ejemplo, no ir a la escuela.

“Una mujer por fuera del sistema educativo se convierte en madre de manera temprana, cuyos hijos tienen mayores probabilidades de morir, de no recibir educación, es una mujer que difícilmente tendrá un trabajo bien remunerado que le permita tener una calidad de vida próspera”, sostiene Norato, al destacar que no se trata solo del hecho de no contar con toallas higiénicas, sino que es una cuestión de derechos y equidad.

Luz Alcira Granada, directora de Incidencia Política de la organización Save The Children en Colombia, coincide con Norato, al destacar que no tener acceso a este tipo de productos aumenta y refleja las brechas de inequidad para las mujeres.

“Se ven afectadas en su autoestima, en sentirse bien, porque cuando les llega el periodo prácticamente tienen que aislarse de la sociedad para no sentirse incomodas”.

Marina Gallego, coordinadora de La Ruta Pacífica de las Mujeres, sostiene que resulta complejo cuando tienen cólicos ya que “además de quedar desescolarizadas durante 4 o 5 días, no tienen cómo acceder a medicamentos que les permitan llevar más tranquilas su periodo”.

Lucha por la equidad

El año pasado la Corte Constitucional tumbó el Impuesto de Valor Agregado (IVA) del 5 % que tenían tanto las toallas higiénicas como los tampones.

Para Rosalba Salazar, integrante del Movimiento de género y Justicia económica, que demandó este impuesto, se percibían como productos de lujo, pues “tenerlos con ese impuesto hacía que fueran más costosos”.

Con esto está de acuerdo Granada, al sostener que “aunque para algunos, principalmente en las ciudades, el costo de estos productos es bajo, otra realidad tienen que vivir las mujeres de estas zonas vulnerables, quienes, comparando los costos con sus ingresos, ven estos productos casi que fuera de su alcance”.

Salazar señala que hay tres aspectos claves de la vida de las mujeres las que se ven impactados negativamente cuando llega la menstruación y no cuentan con recursos para acceder a estos productos: su higiene, su salud y las limitaciones de realizarse como mujer o profesional.

Además de plantear el tabú que aún se tiene para hablar de la menstruación, pues hay quienes la ven como sucia o una enfermedad, Salazar sostiene que una alternativa que se puede emplear en el país son las toallas higiénicas reutilizables, citando el caso de la colombiana Diana Sierra, quien creó la marca Be Girl (ser niña), dedicada a construir calzones y toallas higiénicas reutilizables, con el objetivo de darles dignidad a las mujeres durante su periodo menstrual. Su caso, inicialmente, se aplicó en países de África. “Es una opción que tanto gobierno como organizaciones civiles que trabajen en estos temas pueden revisar para promover equidad en las mujeres pobres del país”.

El Colombiano