ONU alerta por deterioro de derechos humanos en la Sierra Nevada
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos encendió las alarmas por la crítica situación humanitaria que enfrentan comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas en la Sierra Nevada de Santa Marta. Tras una visita oficial a la región, el organismo advirtió un aumento de la violencia, el control de grupos armados ilegales y una persistente ausencia de protección estatal.
El pronunciamiento fue hecho por Scott Campbell, representante del Alto Comisionado en Colombia, quien recorrió el territorio junto a un equipo multidisciplinario y otros organismos internacionales.
Durante la misión sostuvo encuentros con los pueblos arhuaco, wiwa, kankuamo, kogui, ette naka y wayuu, así como con comunidades afro y campesinas, que denunciaron amenazas constantes, homicidios y un clima generalizado de miedo.
Campbell lamentó especialmente el asesinato de Elizabeth Mojica, profesora indígena wiwa y defensora de los derechos de mujeres, niñas y niños, ocurrido el 30 de noviembre en la comunidad de La Laguna, un día antes de la llegada de la delegación internacional. El funcionario condenó el crimen y exigió al Estado colombiano investigar de manera diligente, sancionar a los responsables y adoptar medidas eficaces de protección para la población civil. También recordó el atentado contra el líder wayuu y defensor de derechos humanos Misael Socarrás, integrante de la organización Fuerza de Mujeres Wayuu, en el departamento de La Guajira.
De acuerdo con la documentación de la Oficina de la ONU, en lo corrido de 2025 se han registrado cuatro masacres y al menos ocho homicidios de personas defensoras de derechos humanos en municipios de la Sierra Nevada, ubicados en los departamentos de Cesar, La Guajira y Magdalena.
“La población sufre y vive con miedo. Escuché testimonios de abandono e impotencia frente a las acciones de grupos armados no estatales y la insuficiente respuesta del Estado”, señaló Campbell, tras escuchar relatos de comunidades profundamente afectadas por la violencia.
El representante también puso especial énfasis en la situación de las mujeres indígenas, a quienes calificó como víctimas de violencias inaceptables. Según indicó, enfrentan agresiones sexuales y violencia basada en género de manera reiterada, sin que sus derechos sean plenamente reconocidos ni garantizados.
Ante este panorama, la ONU hizo un llamado urgente a implementar las recomendaciones contenidas en la Alerta Temprana 020 del 2 de diciembre de 2025, emitida por la Defensoría del Pueblo y presentada en Valledupar por su directora, Iris Marín Ortiz. El documento advierte sobre la presencia y accionar de grupos como las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada y el Clan del Golfo, señalados de someter a las comunidades mediante amenazas, control territorial y otras prácticas que vulneran sus derechos fundamentales.
