“Nunca pensé que mi hija dormía con el enemigo”
El dolor era indescriptible. En medio de flores blancas, lágrimas y los honores de la Policía Nacional, familiares, amigos y compañeros de la patrullera Vanessa de León Pertuz, asesinada el pasado 29 de noviembre en Valledupar, le dieron el último adiós este lunes en el cementerio Jardines del Eccehomo.
Entre los asistentes, una voz quebrada llamó la atención de todos; la de Martín José de León, padre de la joven uniformada, quien habló con firmeza y un profundo amor por su hija mientras exigía justicia y enviaba un mensaje que hizo reflexionar a todos los presentes.
“A las mujeres le digo, no se queden calladas, hablen, no permitan que el silencio las destruya. Hoy mi familia está destrozada y no quiero que ninguna más pase por este dolor tan grande”, manifestó visiblemente afectado
El padre de la patrullera, con la voz entrecortada, recordó a Vanessa como una mujer llena de metas, nobleza y disciplina. Aseguró que la joven estaba construyendo un futuro al que le dedicaba esfuerzo y corazón. “Mi hija tenía ganas de crecer, era querida en todas partes; tenía muchas ganas de crecer profesionalmente. Apenas llevaba un año en la institución y ya se había ganado el cariño de mucha gente. Era responsable, entregada y soñadora.”
IBA AL GRADO DE SU HIJO
Por otra parte, Martín José de León contó que Vanesa se desplazó desde Chimichagua, donde prestaba su servicio policial, hasta Valledupar para asistir al grado de su hijo de cinco años, quien era su orgullo, siempre pendiente de él.
Sobre el feminicida, Giovani Mauricio Durán Quintero, dragoneante del Inpec y pareja de Vanesa durante ocho años, Martín José confesó su desconcierto:
“Nunca lo vi como una persona capaz de hacer algo así. Nunca pensé que mi hija corría este peligro, que dormía con el enemigo.”
Las revelaciones conocidas durante la audiencia de legalización de captura, donde se informó que el agresor la llamó más de 50 veces antes del ataque, estremecieron aún más a la familia.
Mientras el féretro era cubierto por la bandera de la Policía, el padre de Vanesa, con un dolor imposible de ocultar, volvió a mirar al cielo y repitió:“Mi hija no merecía este final. Su recuerdo nos seguirá dando fuerza.”
COMPAÑEROS Y COMUNIDAD LA DESPIDIERON
Durante los actos fúnebres, realizados en la Catedral Ecce Homo, compañeros de la Policía Nacional, acompañaron las honras fúnebres de la patrullera de Policía Vanessa de León Pertuz, elevando un mensaje de solidaridad, fortaleza espiritual y acompañamiento a sus seres queridos.
Habitantes de Chimichagua, también se sumaron al último adiós, demostrando el cariño que dejó sembrado y la huella que su espíritu de servicio imprimió en quienes crecieron y compartieron con ella.
Durante la eucaristía se elevaron oraciones por su descanso y por la fortaleza de su familia, en especial por su hijo de 5 años, quien hoy recibe el acompañamiento de sus seres queridos y de la Institución.
Al cierre de la ceremonia religiosa, el cuerpo de Vanessa fue trasladado al Cementerio Jardines del Eccehomo, donde fue sepultada.
El Coronel William Javier Morales Vargas, comandante Departamento de Policía Cesar, manifestó que ante esta situación difícil, la Policía Nacional reafirma su compromiso inquebrantable con el acompañamiento integral a su familia y rechaza de manera contundente cualquier manifestación de violencia contra la mujer.
“Honramos la memoria de la patrullera Vanessa De León Pertuz, cuyo legado de servicio, responsabilidad y humanidad permanecerá vivo en la Institución y en el corazón de quienes hoy lloran su partida”, aseguró.

