El partido entre Real Cartagena y Real Cundinamarca, disputado en el estadio Jaime Morón, terminó en un bochornoso episodio que empañó la jornada del Torneo BetPlay. A los 88 minutos, cuando el marcador seguía 0-0, varios integrantes de la barra sur del conjunto cartagenero invadieron la cancha, lo que obligó al árbitro Diego Ruiz a suspender temporalmente el encuentro.
Los disturbios comenzaron cuando algunos aficionados arrancaron sillas y las lanzaron al terreno de juego, generando caos y obligando a jugadores, cuerpos técnicos y árbitros a refugiarse en los camerinos. La Policía actuó rápidamente para controlar la situación y evacuar a los responsables, mientras la organización pedía calma a los asistentes.
Tras más de 20 minutos de suspensión, el juez determinó que existían las garantías para reanudar el juego, que se completó con dos minutos reglamentarios y ocho de adición. Sin embargo, Real Cartagena no logró romper el empate, pese a dominar gran parte del compromiso. Fredy Montero tuvo la ocasión más clara al minuto 82, cuando estrelló el balón en el palo.
Con este resultado, el equipo heroico quedó prácticamente eliminado, sumando apenas tres puntos en los cuadrangulares, mientras Real Cundinamarca llegó a siete.
El panorama para los cartageneros es crítico: el próximo domingo 16 de noviembre, Real Cartagena visitará a Real Cundinamarca en el estadio Metropolitano de Techo, en Bogotá, a las 7:30 p.m. El conjunto auriverde está obligado a ganar para mantener alguna posibilidad de avanzar, de lo contrario quedará oficialmente eliminado del Torneo de Ascenso.