Triple homicidio en vía de La Guajira: desmovilizado del ELN y su escolta de la UNP, entre las víctimas
El hecho se presentó en zona rural del municipio de Albania. Las autoridades investigan posible implicación de estructuras criminales como el Clan del Golfo.
En un hecho que ha generado consternación en La Guajira y encendió las alarmas de las autoridades nacionales, tres hombres fueron asesinados en la noche del martes 2 de julio en el kilómetro 20 de la vía que conduce de Riohacha al corregimiento de Cuestecitas, en jurisdicción del municipio de Albania.
Los cuerpos, que presentaban múltiples impactos de bala y tenían las manos atadas, fueron hallados a un costado de la carretera. A medida que avanzó la investigación, se confirmó que dos de las víctimas eran un desmovilizado del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y su escolta asignado por la Unidad Nacional de Protección (UNP).
Uno de los fallecidos fue identificado como Jerson Andrei Sanguíneo Avendaño, exintegrante del Frente de Guerra Nororiental del ELN, quien se había desmovilizado en 2018 y era considerado testigo protegido de la Fiscalía General de la Nación. En abril del presente año, Sanguíneo sobrevivió a un atentado con granada en la ciudad de Cúcuta, hecho que motivó el reforzamiento de sus medidas de seguridad.
La segunda víctima respondía al nombre de Boris Omel Rodríguez Alandete, escolta de la UNP, residente en Maicao. Según se conoció, apenas llevaba cinco días brindando protección a Sanguíneo, luego de haber reemplazado temporalmente al escolta titular, quien se encontraba en periodo de vacaciones.
La tercera persona asesinada aún no ha sido identificada por las autoridades. Sin embargo, los investigadores no descartan que también tuviese relación con el esquema de seguridad o que fuera un civil que acompañaba a las víctimas.
En la escena del crimen fue hallado un vehículo Hyundai Elantra, de placas BBK-570, que pertenecería a Boris Rodríguez. Llamó la atención de las autoridades la presencia de grafitis sobre el automóvil con las siglas «EGC» y la frase “Presente EGC”, comúnmente asociadas al grupo armado organizado Clan del Golfo, lo que podría ofrecer una línea de investigación relevante para esclarecer lo ocurrido.
Testimonios de habitantes de la comunidad indígena Los Remedios, cercana al lugar de los hechos, indican que al sitio habrían llegado dos motocicletas y un vehículo, desde los cuales descendieron hombres fuertemente armados que perpetraron el ataque.
La zona donde ocurrió la masacre ha sido identificada por organismos de inteligencia como área de injerencia de grupos armados ilegales, entre ellos el Grupo Delincuencial Organizado ACSN y el GAO Clan del Golfo. Ambas estructuras han sido protagonistas de disputas territoriales y actividades delictivas en el departamento.
Un equipo conjunto conformado por la SIJIN, SIPOL, el Grupo de Operaciones Especiales (GOES), así como peritos del CTI de la Fiscalía, se desplazó al lugar para adelantar las inspecciones técnicas y labores de investigación. Los actos urgentes fueron asumidos por la Policía Judicial.
El triple homicidio representa un grave golpe a las garantías de seguridad ofrecidas a personas en proceso de reincorporación, y pone en evidencia los riesgos persistentes en zonas donde confluyen actores armados ilegales y economías ilícitas. Las autoridades continúan en la recopilación de pruebas y análisis de información para dar con los responsables de este crimen.