´Lo de la papeleta no tiene asidero jurídico´

Por

ANDRÉS

FELIPE

SUÁREZ

Poco después de conocerse la aprobación definitiva de la reforma laboral en el Congreso y cuando se creía que este iba a ser el fin de toda la controversia sobre la consulta popular propuesta por el presidente Gustavo Petro, el mandatario salió con otra iniciativa sacada de la manga: una papeleta para convocar una asamblea nacional constituyente.

“Será entregada una papeleta para convocar la asamblea nacional constituyente en las próximas elecciones.

Espero la decisión de millones para que el próximo gobierno y congreso tengan el mandato imperativo de construir el estado social de derecho, la justicia social, la democracia profunda con las gentes, la paz”, dijo el mandatario en el mismo trino en el que anunció que derogaría la convocatoria a consulta popular.

Expertos consultados por Colprensa creen que un movimiento ciudadano para promover una constituyente ya no tendría cabida y una asamblea constituyente solo puede ser convocada a través de los mecanismos que establece la ley.

El exministro de Justicia Alfonso Gómez Méndez señaló que esta propuesta del presidente no tiene “ningún asidero político ni jurídico” y consideró que el mandatario está siendo mal asesorado.

“En el año noventa se hablaba de papeletas porque era la forma como se votaba. En marzo de ese año había seis elecciones y a través de un decreto por las circunstancias de ese entonces por el estado de sitio se pidió al registrador que escrutará una séptima papeleta para que la gente dijera si quería o no la convocatoria de una asamblea constitucional”, explicó.

Gómez Méndez enfatiza en que “hoy no hay ninguna posibilidad que se pueda convocar una constituyente, excepto a través del Congreso, que es el mecanismo que estableció la constitución de 1991”.

Agrega que llevar a la realidad esta propuesta del presidente es imposible, no solo porque ya no existen las papeletas, sino porque la constitución ya prevé otros mecanismos para reformarla que en esa época no existían.

“Primero, eso no existe hoy porque no hay papeletas, hay tarjetones. De otra parte, se buscó ese mecanismo según la constitución anterior, pero en la constitución del 91 estableció unos mecanismos diferentes, a parte del Congreso está el referendo y la asamblea nacional constituyente, pero solo puede convocarse a través de una ley del Congreso que requiere mayorías”, dice.

Para el exministro, es peligrosa esta postura que está tomando el presidente de utilizar mecanismos como la consulta popular y la asamblea nacional constituyente, sin tener algún sustento en la constitución para convocarlas.

“Aparte del tema de creer que todos los problemas se resuelven cambiando la constitución, esta es una decisión claramente por fuera del ordenamiento jurídico, hay que respetar a la constitución y la ley”, dijo.

Recordó que en 1990 el país estaba en estado de sitio y una grave crisis de orden público, caso muy distinto al actual donde el Congreso acaba de aprobar la reforma laboral que quería el Gobierno.

Por su parte, Alejandra Barrios, directora de la Misión de Observación Electoral (MOE) y quien hizo parte del movimiento de la séptima papeleta, señaló que el presidente debe dar más detalles ante esta idea, ya que lo que propone no existe en las leyes colombianas.

“Convocar una asamblea nacional constituyente como se hizo en el 91 a través de una papeleta o a través de un voto de intención hecho a mano, fotocopiado, o así sea producido por la Registraduría sin seguir los pasos previos en el Congreso, no existe en este país, no existe en forma institucional y no existe en la ley”, señala.

Tras la respuesta del ministro Armando Benedetti, que señala que la asamblea nacional constituyente no es para este gobierno, sino para el próximo, Barrios enfatiza en que, sin importar el año, la constitución tiene claro el camino para convocarla.

“Para el presidente y para Benedetti habría que decir que en este momento valdría la pena iniciar una conversación con las organizaciones políticas y preguntarles que opina, porque si desean hacer una asamblea nacional constituyente en este gobierno, en el otro o dentro de 10 años, aquí hay una ruta en la constitución que dice que se inicia con una ley en el Congreso”.

Incluso, no descarta que este anunció del mandatario sobre la papeleta sea un ejercicio simbólico de introducir un mensaje más que querer una constituyente. Sin embargo, este no tendría “ningún mandato de conteo ni nada, esto no pertenece a las vías jurídicas, sería un mecanismo simbólico” sostiene.

Frente a este anunció y lo sucedido con derogar la consulta popular, como lo dijo Petro, la directora de la MOE recordó que “la mejor manera de llegar a consensos y tener vías en las que todos aceptemos las decisiones es cuando estas cumplen lo que dice la constitución y la ley y cuando se acoge a las vías institucionales.

No tenemos que inventar caminos paralelos porque nuestra constitución tiene las rutas claras por donde movernos”.

Según explican los expertos, la constituyente se podría demorar más de un año debido a todo el proceso requiere el trámite de una ley.

Inicialmente se tramita una ley que requiere de mayorías absolutas, lo que tarda de 4 a 6 meses; luego, viene el control previo de la Corte Constitucional, que puede tardar otros 6 meses, y ahí sí la Registraduría realizaría el proceso logístico para llevar a los colombianos a las urnas, lo que no podría hacerse antes de 3 meses.

/Colprensa