Hay más personas habilitadas para votar que habitantes en La Jagua
ALERTAN POR POSIBLE TRASHUMANCIA
EN LA JAGUA del Pilar, según el Dane, la población es de 4.192 habitantes. Sin embargo, el censo electoral habilitado por la Registraduría Nacional del Estado Civil alcanza los 4.473 votantes.
La tensión política crece en el municipio de La Jagua del Pilar ante la cercanía de las elecciones atípicas programadas para este 18 de mayo, en las que se definirá quién asumirá la Alcaldía tras la anulación del mandato de José Amiro Morón Núñez, destituido por el Consejo de Estado por incurrir en doble militancia política.
Morón Núñez, elegido en 2023 por el Partido de la U, fue hallado responsable de apoyar públicamente a un candidato del Partido Conservador, infringiendo así la norma electoral que prohíbe respaldar aspirantes de otras colectividades. Esta situación abrió paso a un nuevo proceso electoral en el que dos mujeres lideran la contienda: Ivón Manjarrez, candidata del partido Alianza Social Independiente (ASI), quien quedó en segundo lugar en los comicios de octubre pasado, y Lina Tomasa Soto, aspirante por el Partido de la U, hermana del exalcalde Waldin Soto y respaldada por el propio Morón Núñez.
No obstante, el panorama electoral está nublado por graves denuncias de trashumancia electoral, una práctica ilegal que consiste en inscribir la cédula para votar en un municipio en el que no se reside. La Misión de Observación Electoral (MOE) advirtió desde el año pasado sobre una cifra alarmante de inscripciones atípicas en La Jagua del Pilar: un índice del 81.7%, muy por encima del promedio nacional.
La preocupación se agudiza al verificar que según el Dane la población estimada para 2025 en este municipio es de 4.192 habitantes. Sin embargo, el censo electoral habilitado por la Registraduría Nacional del Estado Civil alcanza los 4.473 votantes, lo que evidencia un desbalance inexplicable y potencialmente fraudulento: hay más personas habilitadas para votar que habitantes reales en el municipio.
“Aquí todos nos conocemos. Pero un día antes y durante las elecciones, aparecen rostros extraños por todas partes. Ya está bueno que otros decidan por nosotros”, expresó un habitante de la localidad que prefirió omitir su identidad.
Para las elecciones del domingo, la Registraduría ha dispuesto 12 mesas de votación, de las cuales 10 estarán en la cabecera municipal y 2 en el corregimiento de El Plan. Las autoridades electorales, con el apoyo de la Fuerza Pública, anunciaron un plan de control riguroso antes, durante y después de los comicios para evitar el ingreso de votantes sin vínculos con la población.
La trashumancia electoral es un delito sancionado por la legislación colombiana y representa una amenaza directa a la legitimidad del proceso democrático.
Habrá biometría en los dos puestos de votación, tanto en la zona rural como la urbana, lo que permitirá autenticar la identidad del ciudadano que se dispone a ejercer el derecho al voto. “Vamos a trasladar funcionarios de otros departamentos para acompañar estas elecciones y garantizar el principio de transparencia”, manifestó Jaime Hernando Suárez, delegado electoral de la Registraduría Nacional del Estado Civil.