La reforma que aumenta el monto del sistema general de participaciones (SGP) llega con nuevas modificaciones en un intento por apaciguar el debate que generó la propuesta. El gobierno de Gustavo Petro y el ponente, el senador Ariel Ávila, acordaron una serie de cambios con los que se busca generar los consensos suficientes para apaciguar los ánimos y garantizar el éxito de la propuesta.
En total son siete los acuerdos que salieron de las mesas de trabajo del senador de la Alianza Verde con la cartera de Ricardo Bonilla (Hacienda) y Juan Fernando Cristo (Interior). La principal modificación es que ya no será 46,5 por ciento el aumento de los recursos corrientes de la nación al SGP, sino que la cifra quedará en 39,5 por ciento. Son siete puntos porcentuales menos que la propuesta original.
Es un punto medio frente a la propuesta de otros congresistas, que pedían que se bajara hasta 37,5 por ciento. Uno de los principales argumentos para hacer este cambio, como señaló el ponente Ariel Ávila, es que necesita garantizarse la entrega de mayor recursos a los municipios, porque hay más de 300 que actualmente está quebrados.
El segundo acuerdo, cuyos detalles ya se conocían con anterioridad pero ya se dejaron por escrito, es que se condiciona la «aplicación de la fórmula que aumenta las transferencias a la expedición de la ley de competencias». Aunque en el texto ya estaba esta condición, se hará de una forma más expresa para garantizar que el acto legislativo no entre en vigor si no hay una ley que defina las nuevas funciones que deben asumir municipios y departamentos.