Diario del Cesar
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Fabiola Posada, una guerrera por la vida

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Este miércoles 18 de septiembre de 2024 cumplió 61 años de edad, por lo que sus amigos y colegas en el humor intentaron contactar a ‘La Gorda’ Fabiola Posada para felicitarla. Sin embargo, toda comunicación fue imposible.

Llamaron a su casa o a su esposo, el también humorista Nelson Polanía, más conocido como ‘Polilla’, y se enteraron de la noticia. Desde el pasado lunes la humorista se encontraba en delicado estado de salud hospitalizada en una clínica en el norte de Bogotá, sedada casi todo el tiempo, pues cuando era consciente, los dolores eran tan intensos que le era suministrada morfina para calmarlos.

Por eso, ‘Polilla’ les pedía que le dejaran un mensaje de voz en su Whatsapp, para que los pudiera escuchar una vez lograra tener nuevamente su conciencia. Infortunadamente eso no ocurrió y un día después de su cumpleaños falleció la histórica del humor colombiano: Fabiola Posada.

Su lucha contra sus quebrantos de salud se extendió por más de 25 años. En la segunda parte de los años noventa le fue diagnosticada la diabetes, y desde ese entonces luchó por su vida, contra el sobrepeso que al superar en algún momento los 147 kilos, produjo todo tipo de problemas en su cuerpo, desde cardiacos, respiratorios y de movilidad.

La tarea no era nada fácil, entre su alegría y carisma, aseguraba que vivía siempre con mucho apetito, agotada y con mucho sueño, además de sus fuertes dolores de rodilla. Pese a todo esto, siempre logró convivir con ello, e incluso, hace 16 años, tomó la opción de realizarse un bypass gástrico, que es una cirugía bariátrica que requiere anestesia general, pero es muy poco invasiva y tiene un postoperatorio poco doloroso. Este procedimiento le permitió bajar hasta 35 kilos, pero el daño en su cuerpo ya estaba hecho.

Aunque cada problema de salud era grave e incluso con un alto riesgo de perder la vida, ella siempre aprovechó para sacar un chiste sobre cada situación. “Con este bypass ‘Polilla’ se quitó un peso de encima”, afirmaba.

Hace diez años las alarmas se encendieron, pues en tan sólo ese año, 2014, sufrió cuatro infartos, por lo que volvió al quirófano para realizarse una cirugía a corazón abierto. Tras su recuperación volvió al escenario del legendario programa Sábados Felices.

Las risas no paraban, pero la lucha por su vida tampoco. Tiempo más tarde pasaría cerca de un mes en estado de coma tras desmayarse en medio de las grabaciones de Sábados Felices. En 2019 regresó al quirófano, esta vez, para realizarse una cirugía bariátrica con la que logró perder 50 kilos de peso.

En los últimos años no pararon sus ingresos a las salas de urgencia de las clínicas por distintas dolencias.

Pese a toda esta lucha por vivir y ser feliz, no dejó de trabajar, de estar siempre presente en cada una de las grabaciones del programa ‘Sábados Felices’, de trabajar en su emprendimiento de moda para mujeres de tallas grandes, así como sus shows en distintas ciudades del país, incluso en el exterior, además de las producciones cinematográficas en las que ella siempre fue una de sus principales personajes.

/Colprensa