Doble crimen estaría relacionado a ajustes entre bandas criminales
Las autoridades iniciaron las investigaciones para determinar los móviles del doble homicidio, registrado la mañana del martes, a orillas del río Guatapurí, a la altura del barrio Nueve de Marzo en Valledupar. Una tercera persona, hermano de uno de los fallecidos, presuntamente está desaparecido.
Las víctimas de este hecho fueron Jaime Alberto Gutiérrez Pisciotty, de 31 años, y Luis David Martínez Miranda, de 27 años, quienes recibieron heridas de arma de fuego en varias partes del cuerpo, principalmente en la cabeza.
Martínez Miranda había salido de su vivienda junto a su hermano Ronald Javier Martínez Miranda, quien está desaparecido.
Este caso es materia de investigación para las autoridades, ya que durante los últimos meses en la zona se han presentado homicidios con las mismas características, por lo que presumen que se puede tratar de guerra entre bandas y grupos armados al margen de la ley.
En este caso en particular, las autoridades han puesto la ‘lupa’ en algunos líos judiciales que enfrentaban las víctimas, además de registrar anotaciones judiciales por diferentes delitos. Una de las víctimas tenía mes y medio de haber salido de la Cárcel Judicial.
De acuerdo a información aportada por la fuerza pública, Jaime Alberto Gutiérrez Pisciotty, registra anotaciones en el SPOA por los delitos de homicidio (2021), extorsión (2021) y aprovechamiento ilícito de los recursos naturales (2013). Entre tanto, Luis David Martínez Miranda registra concierto para delinquir (2018), homicidio (2018) y hurto (2014).
El reporte policial indica, que se acuerdo a lo manifestado por los familiares, a la 1:45 de la tarde del pasado lunes, los hermanos Luis Martínez y Ronald Martínez se encontraban en su lugar de residencia ubicado en la invasión Brisas de la Popa, cuando llegó a buscarlos un particular, quienes dialogan por varios minutos y se marchan de la residencia cada uno en sus motocicletas personales.
Es importante mencionar que las motocicletas de los hermanos Martínez, contaban con los servicios de GPS y fue ubicada en poder de Jamer Manuel Sánchez Gary, quien fue acusado por los delitos de receptación y hurto.
Sobre este caso, el secretario de Gobierno municipal, Felipe Murgas, manifestó que por las anotaciones judiciales que registran las víctimas, podría tratarse de alguna retaliación o de ajustes de rentas criminales, ya que en el sector se viene realizando actividad de microtráfico, desatando asesinatos en modalidad de sicariato.
“En el municipio de Valledupar la Defensoría del Pueblo ha emitido tres alertas tempranas, una a favor de los líderes sociales y se ha cumplido con esos protocolos activando las rutas de protección y llevando a cabo los procesos para garantizar la seguridad de los líderes; y las otras dos alertas hacen presencia del grupo del Clan del Golfo y AGC que vienen haciendo presencia en el Cesar, sembrando el miedo mediante grafitis y panfletos.
También la alerta de la presencia de estos grupos en zona rural y urbana en Valledupar. Esto se nos está convirtiendo en una problemática de crimen organizado, sin embargo, hemos realizado consejos de seguridad y se ha determinado que la mayoría de los casos son delincuencia común que se valen del panfleto para aprovecharse”, aseguró el funcionario.