Como esperaban los mercados, los datos de inflación dejaron ver que la Reserva Federal pausará sus alzas de tasas de interés en septiembre, provocando una caída significativa de la moneda, que se maneja por debajo de la línea de $4.000.
El dólar abrió el tercer día de cotización y el cuarto día de la semana bajando. La moneda estadounidense inicio el día con una leve caída, pues registró en horas de la mañana un promedio de $3.965,56, ubicándose $66,09 abajo de la Tasa Representativa del Mercado, que para hoy está en $4.031,65.
Además, este jueves, se registraron mínimos de hasta $3.953 y máximos de $3.975.
*Movimiento de acciones*
Según Bloomberg, los futuros de acciones subieron y los rendimientos de los bonos cayeron después de que los datos de inflación cimentaran las apuestas de que la Reserva Federal pausará sus alzas de tasas de interés en septiembre.
Los contratos del S&P 500 avanzaron un 0,6%. Los rendimientos del Tesoro a dos años, que son más sensibles a los movimientos de política inminentes, cayeron cinco puntos básicos a 4,75%. El dólar cayó un 0,4%.
Una medida clave de los precios al consumidor de EE.UU. registró los avances mensuales consecutivos más pequeños en más de dos años. El índice de precios al consumidor básico, que excluye los costos de alimentos y energía, a menudo volátiles, subió un 0,2% por segundo mes. Los economistas ven la medida subyacente como un mejor indicador de la inflación subyacente que el IPC general, que también aumentó un 0,2% en julio y un 3,2% respecto al año anterior. El repunte en la medida anual reflejó una comparación menos favorable con el índice hace un año.
Los precios del crudo se estabilizaban el jueves ante la cautela de los inversionistas a la espera de unos datos de inflación que ofrecerán pistas sobre las tasas de interés en Estados Unidos. El barril del petróleo Brent, referencia para Colombia, cayó 0,45%% a US$87,16, mientras que el WTI lo hizo 0,60% a US$83,89, en horas de la mañana.
Según Reuters, el WTI tocó el jueves su nivel más alto en lo que va de año, mientras que el Brent alcanzó su precio más elevado desde enero.
Los precios del crudo se han visto impulsados en los últimos días por las prórrogas de los recortes de producción de Arabia Saudita y Rusia, junto a temores de suministro impulsados por la posibilidad de que las tensiones entre Rusia y Ucrania en la región del Mar Negro amenacen los envíos de petróleo ruso.
“Por el momento no parece haber nada adverso en el sector energético que pueda alterar este alza. Tanto los comentaristas como los operadores están más concentrados en los fundamentos que en lo que pueda estar afectando al conjunto macroeconómico más amplio”, dijo John Evans, de la correduría PVM.
“El mal estado de la industria manufacturera china, su sector inmobiliario y cierta obstinación en la inflación mundial destacan como cuestiones que el sector petrolero opta por ignorar en estos momentos”, agregó.
Todas las miradas están puestas en los datos de los precios al consumo de julio en Estados Unidos, que se publicarán más tarde en el día y deberían proporcionar una orientación sobre la futura política monetaria de la Reserva Federal.