Con una ceremonia religiosa, la compañía de sus hijos, de amigos y de los estudiantes de su escuela de formación, fue despedida este lunes la campeona mundial de patinaje Luz Mery Tristán, asesinada la noche del viernes en su vivienda en Cali, a manos de su compañero sentimental, Andrés Gustavo Ricci, quien se manifestó avergonzado y arrepentido.
«Solo espero que en los corazones de todos quede ella y no sea solo este momento, sino en las futuras generaciones», afirmó Mario Valencia Tristán, uno de los cinco hijos de la deportista que fue pieza fundacional del patinaje colombiano, al ganar por primera vez un título mundial y destrozar marcas globales en los años 90.
La despedida estuvo marcada por la solemnidad y el cuadro no podía ser más triste al ver el féretro de la excampeona mundial cubierto por la bandera colombiana, junto a su uniforme lycrado de competencia y sus patines blancos, junto a una fotografía radiante.
Mientras decenas de personas acompañaron a la familia de Tristán, en la ceremonia que se realizó en el centro deportivo que lleva su nombre al sur de la ciudad, las autoridades acusaban a Ricci del homicidio, que según su abogado Antonio Beltrán Torres, no está «en discusión».
Las autoridades aún no se pronunciaron oficialmente sobre este caso, pero incluso hasta el presidente, Gustavo Petro, estimó que se trataría de un feminicidio.
El togado aseguró que la defensa buscará un preacuerdo con la Fiscalía, al tiempo que aseguró que su defendido tiene un «dolor infinito, con una tristeza que no la puedo medir, con una vergüenza, con un arrepentimiento», en declaraciones a Telepacífico. /Colprensa