El magistrado Roberto Vidal, presidente de la JEP, denunció hoy que se incrementaron las amenazas contra miembros de esa Jurisdicción, durante una conferencia de prensa en Bogotá.
Hoy quiero poner en conocimiento de la opinión pública que las intimidaciones contra la
JEP persisten”, afirmó.
El magistrado enumeró las intimidaciones contra magistrados que investigan ‘falsos positivos’ y contra dos abogados y una psicóloga que eran parte del Sistema Autónomo de Asesoría y Defensa de la JEP, que se encarga de ser apoderados y acompañar tanto a víctimas como comparecientes.
Para algunos, las amenazas llegaron en un panfleto, en el que se lee –según el magistrado Vidal– que hay una “sentencia de muerte a los guerrilleros, abogados y colaboradores del fracasado proceso de paz” y “sus cabezas ya tienen precio”, dijo el texto amedrentador.
Para el Presidente de ese Tribunal de Paz se trata de “una amenaza a la JEP en su conjunto”, no a un grupo en particular y señaló a las denominadas Águilas Negras como responsables de esas intimidaciones.
Vidal denunció las amenazas a la Fiscalía y recibió respuesta de la vicefiscal Martha Mancera, quien encargó el caso al director de Derechos Humanos de esa entidad.
El magistrado indicó que, aunque confían en los resultados de la Fiscalía, el ente acusador les ha dicho que hasta el momento no es posible individualizar a los miembros de ese grupo armado.
La JEP, además, se comunicó con los ministerios del Interior, de Defensa y de Justicia, con el Alto Comisionado para la Paz y con Naciones Unidas, cuyo más reciente informe trimestral, sobre el avance del acuerdo de paz, rechazó las amenazas contra comparecientes, víctimas y la Jurisdicción.
Las amenazas llegan en un contexto complicado para los firmantes del Acuerdo de Paz. El magistrado Vidal informó que comparecientes y personas en proceso de reincorporación también han sido ultrajadas y asesinadas, como el caso de Alex David Rivera, cuya muerte se conoció momentos antes de la rueda de prensa, y el de Rigoberto Mendoza Ospina, asesinado en Caquetá, el pasado fin de semana.
“Lamentablemente, las amenazas que se presentaron contra la JEP están acompañadas de un aumento de la tensión y las amenazas que están recibiendo en Caquetá y Putumayo los desmovilizados de la antigua guerrilla”, respondió el magistrado Vidal, a un interrogante de Colprensa
