Diario del Cesar
Defiende la región

Se creía el indio Guaicaipuro y atacó con un vidrió a dos policías

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ADEMÁS DE DESTROZAR SU VIVIENDA

Una situación fuera de lo normal se registró en el barrio San José del municipio de Becerril, donde un hombre, quien aseguraba estar poseído por el espíritu del indio Guaicaipuro, agredió todo lo que estaba en su entorno, causó destrozos a su vivienda y atacó con un vidrio a los funcionarios de la policía que intentaban controlarlo, por lo que fue necesario neutralizarlo con un disparo en la rodilla para luego capturarlo y evitar que causara una tragedia mayor.

El hombre, quien fue identificado como Carlos Arturo Mendoza Medina, de 33 años, de nacionalidad venezolana, se mostró transformado, con una fuerza casi incontrolable y un rostro de amargura y rabia; solo vestía ropa interior y a todo pulmón aseguraba que estaba transformado en el indio Guaicaipuro.

A toda luz, este hombre asemeja algunas costumbres que dentro de la brujería y santería se practican en algunas regiones de Venezuela, de donde es originario. El cacique Guaicaipuro está íntimamente ligado al relato de la resistencia indígena en Venezuela, es una de las tres potencias del culto popular venezolano, en cuyos rituales las bebidas alcohólicas, el baile y la fuerza ante los demás, es el común denominador.

En este caso, Carlos Arturo Mendoza, asegurando estar poseído por el espíritu del indio Guaicaipuro, y según lo denunció su compañera sentimental ante la estación policial a donde acudió en busca de ayuda, en su transformación causó destrozos graves a su vivienda y puso en riesgo la integridad de su familia.

Pero no obstante con eso, al llegar la comisión policial, este hombre los atacó con un vidrio en varias oportunidades y aunque se intentó persuadirlo seguía poniendo en peligro a dos uniformados, quienes debieron actuar y dispararon en la pierna izquierda, a la altura de la rodilla, logrando controlar la situación sin causar daños letales.

Arturo Mendoza Medina fue capturado en flagrancia y trasladado al hospital San José de Becerril, donde recibió asistencia médica oportuna. Posteriormente fue dejado a disposición de las autoridades competentes, por parte de la Fiscalía 32 Local del municipio de Jagua de Ibirico, por el delito de violencia contra servidor público, cuyos cargos aceptó ante la honorable juzgado 1 Penal con Funciones Garantía de Municipal de Becerril Cesar. Le fue impuesta medida de aseguramiento intramural con detención domiciliaria.