“Lo hizo para vengarse de mí, solo Dios puede perdonarlo”
POR: NINOSKA REYES URDANETA
“Mami ya venimos, no te vamos dejar solita”, fueron las últimas palabras que la niña de 7 años le dijo a su madre Yeraldin Marcela Soza, antes de partir con su hermanito de 4 años a pasar un día ‘feliz’ con su padre Francisco Hernández Rojano, quien sin piedad envenenó a sus dos pequeños hijos y luego intentó suicidarse, en hechos ocurridos la tarde del domingo en el barrio El Mirador, del corregimiento de San José de Oriente, municipio de La Paz.
Casi sin fuerzas para hablar, por el dolor profundo que siente ante la muerte de sus dos únicos hijos, Yeraldín Marcela manifestó a este medio, que los pequeños se fueron felices con su papá, a quien no veían desde hacía varias semanas y le había prometido al niño comprarle unas chanclas.
“Él llegó a la casa el sábado temprano y me dijo que quería llevarse a los niños a pasar el domingo con él, ya que nosotros teníamos cuatro meses separados. Al día siguiente, llegó a las 8:40 de la mañana a buscarlos, recuerdo la sonrisa de mis niños; el varón llevaba puesto un pantalón de color naranja y ella un vestidito verde, que escogió para verse más bonita”, dijo Yeraldín en medio del llanto.
En la casa 4-02, ubicada en la calle 2 del barrio Brisas del Río, en San José de Oriente, se respiraba y sentía la consternación de los familiares y allegados de la familia. Allí residía Yeraldín, junto a una tía y su prima, luego de haberse separado de Francisco y de donde este hombre se llevó a sus hijos, hasta el barrio El Mirador, donde cometió el atroz hecho.
Allí estaba sentada, rodeada de familiares, quienes procuraban darle fuerzas y consolarla por este terrible momento, sin embargo, Yeraldín no paraba de llorar y una y otra vez manifestaba “Adriana Lucía y Moisés Javier eran la razón de vida, por qué se los llevó para matarlos, simplemente para causarme este dolor por no seguir a su lado”.
Recuerda a la adolorida madre, que desde el momento en que los infantes salieron con su padre, ella sintió algo malo en su corazón, “yo tenía miedo, estaba desesperada, las horas pasaban y sentía que debía irlos a buscar con la Policía, hasta que llegó la mala noticia, ya me los había matado”.
Adriana Lucía Hernández Soza, de 7 años, estudiaba primaria en la Escuela Mixta San José de Oriente, mientras que su hermanito Moisés Javier (4), asistía a un CAI del Instituto Colombiano de Bienestar Familiares.
MI VIDA CON ESE HOMBRE FUE UNA TRAGEDIA
“Mi vida con ese hombre siempre fue una tragedia, pasábamos necesidades y hasta me había maltratado, por eso hace cuatro meses decidí venirme a la casa de mi prima, donde estábamos bien. Él no trabajaba casi y poco respondía por nosotros”, afirmó.
Asimismo, manifestó que nunca les compró nada nuevo ni a ella ni a sus hijos, y desde que decidió separarse no dejaba de insistir para que volvieran, “esto lo hizo para vengarse de mí, solo Dios puede perdonarlo”.
Alix Contreras, tía de la joven y dueña de la vivienda donde vivían Yeraldín y sus hijos, dijo que en días anteriores Francisco mostró disgusto porque según, le habían dicho que la madre de sus hijos se estaba abrazando con un hombre en la puerta de la casa, por lo cual empezó a molestar y quizás eso fue lo que lo llevó a cometer esta tragedia.
“Pero ese comentario es totalmente falso, porque ella estaba con su padre que había llegado de Barranquilla, y a quien tenía mucho tiempo si ver. Esto es injusto, esos niños eran felices aquí con nosotros, le dábamos todo porque él nada les compraba, ellos eran la alegría de esta casa. Yeraldín nunca abandonó a sus hijos como algunas personas han dicho, permitió que su padre se los llevara un día porque la niña quería ir a pasear con él, se sentía contenta”.
HECHO REPUDIABLE
En el corregimiento de San José de Oriente, el ambiente es de dolor y conmoción, por las angostas calles del pueblo pasea la tristeza entre adultos y niños, quienes aún no dan crédito a lo sucedido.
Tal es el caso de Jorge Esteban Pérez, líder de la Junta de Acción Comunal de San José de Oriente, quien de manera rotunda rechaza este abominable hecho que enluta a una familia de la zona.
Manifestó que tanto Yuraldín Soza cono Francisco Hernández, eran relativamente nuevos en la comunidad, ellos habían llegado desde Manaure apenas el año pasado. “De él sabemos que es oriundo del Magdalena, se conoció como una personas tranquila y callada; trabaja en el pueblo, pero jamás se le observó alguna conducta agresiva, es inexplicable lo que pasó”.
Omar Salguero, también habitante de San José de Oriente, dijo que en varias oportunidades compartió con Francisco en una de las tiendas del pueblo, era de poco hablar, pero nunca se le vio alguna agresividad o gestos que le permitirían llegar a matar a sus hijos. “Es una situación imperdonable, Dios por algo lo dejó con vida en este lamentable episodio”.
Martha Prado, hermana de Yeraldín, dijo que supieron que ese hombre durante los últimos días trabajó en una finca, allí muchos de sus compañeros lo veían como aislado, no comía y tenía una conducta rara. “Se iba a trabajar, llegaba y se acostaba sin hablar con nadie, era como un demonio”.
MINUTOS ANTES COMPRÓ DOS YOGURES
A la segunda calle del barrio El Mirador, llegó el domingo Francisco junto a sus dos hijos. Entraron a la vivienda donde hace cuatro meses vivió toda la familia y cuya propiedad es de la madre de Yeraldín, quien habita en Manaure Balcón del Cesar.
“Entraron los tres, y minutos después el hombre salió a la tienda que está en la esquina de la casa, donde compró dos yugueres y tres panes. Dentro del inmueble permanecieron varias horas, los niños nos e vieron jugar en el patio ni salieron más”, dijo un habitante del sector, quien prefirió omitir su identidad.
En el transcurso de la mañana, algunos vecinos lo vieron barriendo el patio trasero de la vivienda, que entraba y salía con las manos en la cabeza, pero todos ignoraban la situación, hasta que cerró el inmueble y salió.
“Él caminó varias cuadras y en una de las tiendas del barrio hizo una llamada a la suegra de nombre Miriam, a quien le dijo por teléfono que le había dejado un regalito en la casa, comentario que desesperó a la mujer, quien se comunicó con algunos vecinos para que verificaran; se asomaron por la ventana del segundo cuarto de la casa y los niños estaban acostados arropados, ya los había matado y se veían dormidos”, explicó el vecino.
Aseguran algunos miembros de la comunidad, que luego de ir a la tienda regresó a la casa, y sería en ese momento en el que consumió también el veneno (herbicida). Al rato salió caminando como si estuviera borracho y se presentó como a las 4:00 de la tarde en la estación de policía del barrio, donde comunicó lo sucedido.
Comentan que no entiende como Francisco pudo matar a sus propios hijos, ya que la niña principalmente era muy apegada a él, siempre se veía que lo buscaba. Recientemente el hombre había solicitado la custodia de los menores, pero el Icbf se la otorgó a la madre. Ya él no se veía por el barrio, al parecer se iba a trabajar las tierras en otras zonas rurales y regresaba cada cierto tiempo.
Cesar Augusto Tellez, coordinador de la institución educativa donde estudiaba la niña de 7 años, dijo que en las próximas horas realizarán una marcha por la avenida principal de San José de Oriente hasta llegar a la sede de la escuela, en rechazo al maltrato infantil. Los niños llevarán carteleras en contra del maltrato, ya que ellos nacieron para ser felices y ese derecho debe ser cumplido por los padres.
La Comisaría de Familia inició la ruta de atención a la madre de los niños y su entorno familiar.
EL HOMICIDA ESTÁ RECLUIDO
EN CLÍNICA DE VALLEDUPAR
Andrés Palencia, director seccional de Fiscalía en el Cesar, respecto a las investigaciones por este caso, dijo que ha sido un hecho lamentable que afecta al departamento y cuyas investigaciones están en curso.
Manifestó que el hombre involucrado en este repudiable crimen, identificado como Francisco Hernández Rojano, aunque intentó autoeliminarse, la atención médica oportunidad lo impidió y de inmediato fue remitido a una clínica de Valledupar, donde se mantiene bajo pronóstico reservado. “La Fiscalía y la Policía Judicial están a la espera de que recobre la conciencia para proceder con la imputación y la judicialización pertinente por este doble homicidio agravado”.
Sobre las causas de este lamentable hecho, el director de fiscalía informó que presuntamente este hombre no acepta el rompimiento de la relación sentimental que sostenía con la madre de los menores, por lo que opta en presunta venganza, eliminar a los hijos e intentar suicidarse.