Diario del Cesar
Defiende la región

‘Chico’ Bolaño: inolvidable juglar episódico y político    

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POR: CÉSAR AUGUSTO CELEDÓN 

 

Francisco ‘Chico’ Bolaño fue un notable intérprete y narrador musical que a través de su acordeón ejerció con honores un protagonismo interpretativo de tinte airadamente de protesta.

Fue uno de los pioneros en esta modalidad. Su verdadero nombre fue Francisco Irineo Bolaño Marzall, nació un 2 de julio de 1902 en el progresista municipio de El Molino (La Guajira) en el hogar conformado por Pedro Bolaño y Cristina Marzall.

Los acordeoneros de la dominada eran ‘hombriana’ se distinguieron por constituirse en auténticos mensajeros, es decir, era el periódico cantado que iba transmitiendo los diversos acontecimientos, que sucedían en las regiones a través de la música, que salía de su taumaturgo instrumento.

En la historia de la música vallenata a la hora de hacer, es decir, de “fabricar” reconocimientos a sus fieles exponente y juglares, uno de los pocos que merece ocupar un sitial de honor es ‘Chico’ Bolaño, inolvidable y consagrado intérprete episódico y político.

Su aporte ideológico es reconocidamente elogiable, pues, excepcionalmente se le considera un adelantado de su época, asistido por un arrebato lírico desafío a la tiranía y la opresión que deseaba implantar el arribista y sanguinario y anexionista dictador peruano Sánchez Serro, quien pretendía tomarse el estratégico puerto de Leticia y nuestro Cid Campeador, en una aparición bravía, impulsó a través de su humanismo poético una revuelta popular, con el fin de incendiar los ánimos de los colombianos para defender valiosas regiones de nuestra soberanía nacional.

‘Chico’ Bolaño es innegablemente una figura juglaresca contestataria, que se distinguió siempre por expresar su conformidad ante el desequilibrio humano a pesar de vivir enclaustrado en los lamentos de la miseria; pues la música seguía siendo para él una consigna, pero también un arma ideológica, es decir, una inextinguible y portentosa antorcha con fines creativos y sociopolíticos para enfrentar las inexpugnables diferencias sociales de la época.

En aquella oportunidad nuestro consagrado instrumentalista valerosamente tomó su acordeón para combatir con su música las huestes peruanas durante la fratricida guerra y compuso una canción protesta en aire de puya llamada ‘Sánchez Serro’.

 

II

Ay que no crea Sánchez Serro

Que va a jugar con Colombia

 

Porque como se proponga

Podrá morir como un perro

Que no merece ni entierro

Porque es un hombre animal

Que se ha querido robar

Nuestro puerto de Leticia Y llega la hora propicia Y nos llaman a pelear.

CORO

¡Ay! que viva Colombia ¡Ay! Abajo el Perú.

IV

Colombia está bien armada

Fuerte de todas maneras

Para luchar en la guerra

Por el Perú provocada

El Doctor Olaya Herrera

Que es el dueño del pendón.

Él exige un batallón

Con dos cruceros de guerra

Pa devolvernos la tierra

Que nos quitó ese bribón.

 

Estas canciones reiteradamente protestas indudablemente influyeron en otros compositores vallenatos pues ‘Chico’ Bolaño también es autor de ‘La Corzo’, un merengue que trata sobre la vida prostibularia de una dama lógicamente de poco crédito moral que se instaló en San Juan del Cesar en una casa para ofrecer sus servicios sexuales.

Paradójico es el hecho donde ‘Chico’ Bolaño interviene musicalmente para defender al Padre Serrano dueño de un alambique que el resguardo de rentas departamentales le quería confiscar y nuestro ferviente panda con su musical protesta logró que el pueblo se levantara en armas para evitar que se apropiaran del chismográfico artefacto etílico.

‘Chico’ Bolaño también es autor del inolvidable paseo ‘La Zona’, otros lo llaman ‘Santa Marta’:

“Santa Marta tiene tren / pero no tiene tranvía

Si no fuera por la zona / Hay Hombe Santa Marta Moriría”.

Esta última canción protesta ha sido grabada por importantes orquestas y su ejecución aún perdura en el imaginario colectivo.