Bobby Cruz: Sus orígenes, fe y toda una vida musical
A sus 83 años, cumplidos el pasado 2 de febrero (aunque lo inscribieron el 26), Robert Cruz Ramos o Bobby Cruz para los salseros, tiene tantos proyectos artísticos que descarta de plano su anunciado retiro. Este cinturón negro en karate, joyero y pastor cristiano viene con nueva producción musical, la película Los Reyes de la Salsa y serie de libros en Amazon. Pero además Hormigueros, su pueblo natal en Puerto Rico, que ya ha bautizado calles y centro de convenciones con su nombre, tendrá ahora un museo para honrarlo.
“Ricardo viene de frente, con su sonido bestial… ¡Heeeey!, que ahí viene Richie, viene virao/ como bestia, tocando un tumbao”, es el famoso coro con el que salsero, que se precie de serlo, reconoce a este cantautor, que junto al pianista Richie Ray dieron origen al Sonido Bestial y al bautizo del género con el nombre salsa. Un hombre, ahora de fe, que dejó todos sus vicios por Jesucristo, al que no le duele ni una muela, y que al otro lado del teléfono se le escucha reír con sus propias ocurrencias
Uno de los proyectos en los que trabaja es en el disco con los Soneros Dorados de Cuba, ¿por qué dijo que era un álbum de despedida?
Yo pensaba que este sería mi último proyecto discográfico, pero se está cuajando otro del que no puedo hablar porque alguien lo copia. Se supone que este fuera mi proyecto final con los Soneros Dorados de Cuba. Es un álbum de pura salsa. Contiene diez canciones, yo hice cinco y los cubanos, cinco. Ya está terminado y se está trabajando es la carátula.
¿Y las composiciones suyas en este disco en qué están inspiradas?
Tú sabes cómo es la salsa, de verdad, el mensaje siempre es el mismo. Algo sencillo, pero que se pueda usar bien para sonear y que sea rítmico. Pero es un mensaje limpio, no se parece al de la música hoy en día.
Y está lista la película de su vida junto a Richie Ray, Los Reyes de la Salsa. ¿Cómo le pareció? ¿Ya se la mostraron?
Sí, está terminada, yo la vi, y no tuve ninguna crítica que hacerle y yo soy bien fastidioso, cuando hago cosas me gusta que queden bien. Es fiel a la historia musical de Richie Ray y Bobbie Cruz. No están añadiendo cosas que no pasaron.
¿Qué tanto se parecen los actores a ustedes?
Son puertorriqueños, y te digo, son Richie Ray y Bobbie Cruz en los años 70, se parecen a nosotros, nos estudiaron. Si ves a Richie en el piano y al actor, son iguales. El actor se parece tanto que el productor me enseñó una foto de Richie sentado al piano y la misma foto con el actor en la misma pose y me preguntó “¿Cuál es Richie?” y yo escogí al actor creyendo que era Richie.
¿Usted o Richie autocensuraron temas para el film?
No, es totalmente fiel a la vida de nosotros, no hace hincapié en la asquerosidad que vivimos (drogas, sexo y alcohol), sí se ve un poco de eso, pero no se concentraron en eso sino en la historia musical.
Antes del Covid hacía conciertos. ¿Cómo vivió el confinamiento?
Me retiré de los escenarios un poco antes de la pandemia, pero no quiere decir que me haya retirado de la vida, como ves, sigo produciendo.
¿Cuándo empezaron a cantar juntos?
¡Uh! Richie empezó a tocar conmigo cuando él tenía 12 años y empezó tocando el contrabajo, no el piano, y su hermano menor, Ray Maldonado, tocó trompeta con el grupito mío, que yo tenía a mis 15 o 16 años.
¿Cómo fue el camino para convertirse en Reyes de la Salsa?
Trabajamos fuerte. Llegamos a la conclusión de que no podíamos competir con Puente, Pacheco, Palmieri y Ray Barretto, eran demasiado buenos y decidimos que teníamos que entrar con algo que fuera diferente. Le dije a nuestro representante que nos buscara trabajo en los hoteles de veraneo, con la idea de que Richie y yo pudiéramos vivir en el hotel y pasar todo el día inventando qué íbamos a hacer para no sonar como cualquiera de ellos. Así hicimos los arreglos para el primer disco que se llamó Ricardo Ray Arrives, y hicimos uno de esos inventitos, un tema que se llamó ‘Comején’. El truco es que empezaba lento y a mitad de la canción rompía a lo que hoy se llama salsa, que todavía no se llamaba así, el nombre salsa vino cuando habíamos hecho varios discos.
El nombre salsa surgió en una entrevista en la que usted y Richie asocian su música con Kétchup, ¿cierto?
Sí, eso sucedió en Caracas, Venezuela, el disjockey se llamaba Phidias Danilo Escalona, le decían “el loco” y “el bigotón”. Te voy a decir las palabras exactamente como él las dijo: “Miren, a mí me llaman “El Loco Phidias”, pero la música de ustedes está más loca que yo, ¿cómo ustedes le llaman a esa música?” y Richie le dijo: “Phidias, eso es Kétchup” y como es una marca norteamericana de la que Phidias no tenía idea, este preguntó: “¿Y qué es eso?” y yo le dije: “Phidias, Kétchup es la salsa que se le echa a las hamburguesas para darle sabor”. Y él dijo: “Ah, ya lo oyeron, la música de Richie Ray y Bobby Cruz es salsaaaaa”… y tiró el Jala Jala: “Titintititi”… A él lo escuchaba toda la juventud venezolana, era el Rey del Radio. Con Richie estábamos siendo representados por un refresco y por un canal de Venezuela, pero no había un lugar donde presentarnos suficientemente amplio y el canal optó por presentarnos en la calle, los jóvenes se aglomeraban y cuando querían la música movida de nosotros, gritaban: “Richie y Bobby, salsaaaa, salsaaa”, porque oyeron a Phidias decir eso, yo me percaté de que eso podía gustar. Nosotros ya teníamos un álbum grabado llamado Los Durísimos. Llamé a nuestro productor en aquel tiempo, Pancho Cristal, y le dije: “Pancho, necesito que escribas debajo en la cobertura del disco, ‘Salsa y Control’ y me dijo: “¿Y qué cosa es eso?”, : “Olvídate de qué cosa es eso”, le dije, “solo escribe: ‘Salsa y Control’ y ya no te preocupes”.
¿Por qué cree que Richie se convirtió al cristianismo primero que usted?
Yo no creía en Dios. Yo decía que Dios no creó al hombre sino que el hombre creó a Dios porque quería seguir viviendo después de la muerte, pensaba: “Cuando tú mueres, se acaba todo”, pero Richie siempre decía que nuestra felicidad tenía que venir ‘de arriba’. Yo me puse mal cuando se convirtió, pasó unos meses después de ganar Los Reyes de la Salsa, a él no lo llenaba eso, hasta pensó en el suicidio. Pero ahora éramos Los Payasos de la Salsa, todo el mundo se mofaba de nosotros, nos gritaban locos. Richie que se convirtió en febrero y yo en noviembre.
¿Qué hizo que usted se decidiera?
Me puso a pensar el cambio que sucedió en Richie, estoy con él desde que tenía 9 años, era más malo que Caín y tuvo un cambio impresionante, yo le decía a los de la orquesta, “ya no le pueden decir Richie, ahora tienen que decirle es San Richie”, mofándome. Pero no podía negar el cambio que Jesús operó en él, dejó de tomar, de fumar, de usar drogas y no tocaba una muchacha aunque se le tirara encima. Yo decía “esto no es normal”.
¿Cómo se disipó el temor de no perder a sus seguidores salseros?
Al principio los creyentes nos rechazaban, creían que éramos falsos y que había algo oculto detrás y los fanáticos nos llamaban los Traidores de la Salsa, pero una vez yo supe que Dios era real, estaba dispuesto a lo que Él quisiera conmigo, si nunca volvía a cantar, estaba bien. Yo a Jerry Masucci, el presidente de Fania, con el que teníamos un contrato, le había dicho que no íbamos a volver a grabar, pero él, para que no nos fuéramos, dijo: “Hagan música cristiana con mensaje para que la gente se convierta, siempre que hagan con salsa”. Grabamos Reconstrucción, donde está el tema Juan en la Ciudad y fue un batazo y seguimos grabando con Fania música cristiana. En Barranquilla, Soy tan Feliz, aún lo cantan todos.
¿Cómo conoció a Rosemarie, su esposa norteamericana?
Sus padres murieron y una familia de puertorriqueños la adoptó. Yo entré a una fiesta, el sitio estaba lleno y ella me llamó (no por mi nombre, no me conocía) y me dijo: “siéntate aquí”. A los dos meses nos casamos. Llevamos 60 años casados.
¿Sus hijos heredaron su talento artístico?
Cindy y Tania tienen un timbre de voz lindo y han grabado conmigo en ‘Bobby Cruz en Familia’. Bobby Junior es excelente percusionista, pero les gusta la iglesia, no este revolú.
El secreto para durar tantos años juntos con Rosemarie es, según Bobby: “Te sometes a ella, te callas la boca y haces lo que ella dice”.
¿Cuál ha sido su satisfacción como pastor?
La primera iglesia la fundamos Richie y yo en Miami y es la que mi hijo está pastoreando. En La Florida abrimos ocho. En el mundo hemos abierto 60, en Cali está Casa de Alabanza o Casa del Joven, pero por el peligro que implicaba ir a Colombia, porque trataron de secuestrarme en Bogotá, nunca fui, hay otras cruzando el Magdalena.
¿Qué le dice a quienes han perdido la fe en estos tiempos de pandemia?
Yo no sé cómo viví sin Dios. Tenía éxito, pero mi casa era un infierno, pensé muchas veces en hacer disparates, Richie también, cuando Dios le habla, él estaba pensando en el suicidio. Pero una vez tú tienes a Dios, nada te causa ansiedad, hay presiones, pero tienes esa seguridad de que todo está bien, no importa cuán difícil se vea, Dios te va a sacar del problema./Colprensa