El hallazgo del galeón San José es considerado por muchos como uno de los más grandes de la humanidad. Su condición histórica y los grandes tesoros que se hundieron hacen que los ojos del mundo de la arqueología y la cultura estén puestos sobre este.
Precisamente, por el futuro del galeón, la Red Universitaria de Patrimonio Cultural Sumergido manifestó, por medio de un comunicado a la opinión pública, su preocupación por el silencio prolongado del Estado sobre la gestión que debe realizarse para rescatar los restos de la embarcación.
De paso, recalcó que “contratar una empresa cazatesoros para rescatar el galeón San José es altamente inconveniente porque el interés de estas firmas se centra solo en la parte mercantil y riñe con el deber de la Nación de proteger su patrimonio”.
¿En qué va el proceso?
De acuerdo con el director de la Agencia Nacional de Defensa Jurídica del Estado, Camilo Gómez Alzate, el “silencio” está sustentado en que la pandemia paró un poco el proceso de reajuste contractual, pero “antes de que termine el año tendremos todas las definiciones legales bajo la nueva modalidad del galeón”.
“Todo el sitio del naufragio es considerado como una unidad Patrimonio Cultural de los colombianos, eso implica que lo que se había pactado antes con los ingleses ya no se puede hacer y toca cambiar toda la estructura de la APP porque no se pueden llevar ni una astilla del galeón, eso es patrimonio imprescriptible e inalienable, es decir, no se puede entregar nada para ningún propósito distinto. Esto es para que los colombianos lo conozcan y sea parte de la historia”.
“El galeón está muy profundo. Solo pocos equipos pueden llegar hasta allá y no se trata de meter una pala y sacar todo, sino de descubrir, por ejemplo, la alimentación de los marinos de la época, porque según las fotos aún están las ollas de la cocina.
“Esto cambió de una expedición para sacar un tesoro a una para hacer arqueología, donde todo se queda en Colombia y eso es todo lo que se está cambiando”, dijo.