Por segunda vez queman el templo sagrado kankuamo
POR NINOSKA REYES URDANETA
Durante la madrugada de este domingo 22 de noviembre, en la vereda El Pontón del corregimiento de Atánquez, municipio de Valledupar, prendieron fuego una kankurúa, o templo sagrado, del resguardo indígena kankuamo, lo que ha ocasionado una grave afectación y pone en alerta a la comunidad ante tan irregular hecho.
La kankurúa es un centro ceremonial para la realización de actos religiosos por parte de la etnia indígena. Las llamas alertaron a la comunidad a las 4:00 de la mañana del domingo, y hasta ahora de desconocen las causas y quienes son los responsables de este lamentable hecho.
Al respecto, Ricardo Luis Romero Martínez, corregidor de Atánquez, informó que nuevamente la población de El Pontón amaneció consternada con este incendio, episodio que se repite un año después del incendio de otra kankurúa en la comunidad, hecho que aún está en investigaciones y a la fecha no se han determinado responsabilidades.
Romero Martínez manifestó además, que hace aproximadamente dos meses, en esta comunidad apareció un panfleto donde estigmatizan a varios miembros de la comunidad, a quienes les hacen amenazas infundadas. “Esto no se justifica, nosotros somos gente de paz que vivimos en estos corregimientos, son hechos que de alguna manera alteran el orden público, ya que la gente de estos corregimientos no está acostumbrada a esta guerra y solo busca resurgir y vivir sin violencia”.
El corregidor manifestó la solidaridad con los habitantes de la vereda El Pontón, ya que es un hecho lamentable porque evidencia que hay divisiones en estos caseríos, que atentan con el bienestar de la población en general.
Dalmer Romero, cabildo de El Pontón, dijo que por ser una estructura tradicional de paja, las llamas acabaron con todo lo que estaba allí dentro. “Ya nosotros habíamos sufrido un atropello por manos inescrupulosas, quemaron la kankurúa que representa a los hombres y ahora acabaron con el espacio que representa a las mujeres”.
Afirmó que hasta el momento no se tienen indicios de lo ocurrido, pero si están seguro que fue un hecho provocado, ya que había estado lloviendo y la paja estaba mojada por la parte de arriba, debieron iniciar las llamas por la orilla.
Ahora se está trabajando de la mano con las autoridades ordinarias como la Policía y el Ejército, además de esperar la intervención de los entes de control para esclarecer el hecho. Los líderes indígenas también llevan a cabo sus investigaciones internas.