Restituyen lote junto con dos cabañas en Minca
El predio había sido ocupado con falsos documentos por una pareja que pretendía adueñarse de ese terreno
Después de cuatro años en el que se cumplió un complejo y angustioso litigio en los estrados judiciales, la señora Cynthia Darwin, una exempleada de la rama judicial en Santa Marta, logró recuperar su propiedad que estaba siendo hurtada por una pareja, líderes religiosos de una congregación local.
Los últimos fallos de este proceso se dieron, según providencia del Juzgado Tercero Civil el día 11 de febrero de 2020 y sentencia del 26 de febrero de este mismo año. La diligencia de desalojo del lote, la ordenó la Alcaldía Local Tres el día y debía cumplirse este jueves 12 de noviembre del año en curso a partir de las 8:00 de la mañana.
Este evento se cumpliría con la presencia de unidades de la Policía Metropolitana, Personero Distrital, funcionarios de la Defensoría del Pueblo y del Bienestar Familiar.
La diligencia de lanzamiento estaba dirigida contra los demandados, María Ener Cataño Mendoza y su esposo Ramón Elías Hernández Vanestrales, quienes ocupaban inmueble desde diciembre 2016, con consentimiento de su propietaria, para su administración.
“Por motivos de salud y estar por fuera del país él aprovechó estas circunstancias, para tratar de adueñarse del inmueble. Hasta una camioneta que me costó a mí, tuvo el abuso de venderla sin mi consentimiento”, sostiene la denunciante.
Afirmó que desde que conoció a Cataño y Hernández, “pensé que eran personas confiables por decir que eran Testigos de Jehová y los animé a salir del sitio donde vivían en el barrio Tayrona, les pagaba para que cobraran los arriendos de mis propiedades y según ellos, los inquilinos nunca pagaban”.
Según la denunciante, algunos muebles y materas que había trasladado a sus cabañas en Minca, fueron extraídas por los denunciados ante la Fiscalía General de la Nación. “Yo les ayudé de diferentes maneras y ellos pretendieron dejarme en la calle”, sostuvo en su denuncia.
Los ocupantes del lote fueron notificados acerca de la diligencia de lanzamiento, “pero a escondidas se llevaron algunas de mis pertenencias y han regalado mis plantas a vecinos”, contó la mujer que además explicó que, la ley actuó eficazmente bajo la mano de Dios, para que ellos salieran como lo que son, unas malas personas.
La afectada contó también que presentará denuncia ante la Fiscalía contra los ocupantes por el delito de hurto, teniendo en cuenta que se llevaron los objetos que conservaba en la cabaña del primer piso y las redes de energías avaluadas en dos millones de pesos.
“Esta ha sido una experiencia dolorosa, porque cuando descubrí el seis de diciembre 2016, que eran unos estafadores, me rogaron que no los echara que les permitiera estar unos días, mientras, encontraban donde mudarse, que me pagarían arriendos y que firmarían un contrato de arrendamiento, el cual incumplieron y no pagaron un solo peso, vivieron en mi propiedad de mala fe, porque hasta subarrendaron, se robaban la electricidad y el agua que yo cancelaba todos los meses; aparte de vender mi camioneta Ford Explore, dañaron mi reputación dentro y fuera de la iglesia”, añadió Cynthia Darwin.
Sostuvo, además, que tuvo que irse de Minca, porque la amenazaron con darle muerte, pero que esta pesadilla terminó gracias a Dios.