Gran preocupación existe entre los moradores del casco urbano de Bocas de Satinga, del municipio de Olaya Herrera, costa pacífica nariñense, luego del secuestro de ocho personas, en hechos aislados, quienes al parecer pertenecían a grupos disidentes.
Las primeras versiones de los allegados de los secuestrados expresaron que ellos se dedican a una labor específica, lo que hacer presumir que los casos están relacionados.
El primer hecho se presentó el pasado miércoles 8 de mayo, cuando fueron secuestradas tres persona en el barrio La Pista, en pleno casco urbano de la población. El segundo caso ocurrió el sábado en el sector rural, donde se llevaron a dos hombres. El último se presentó el domingo, también en zona rural.
En horas de la mañana del lunes aparecieron dos de los primeros secuestrados en una calle de la población de Bocas de Satinga con varios impactos de bala en diferentes partes del cuerpo, lo que les produjo su muerte de manera inmediata.
La identidad de las víctimas permanece en reserva debido al riesgo que corren sus familiares.
En este sentido, uno de los familiares, quien solicitó no ser identificado por temor a represalias, expresó que han recibido varias llamadas amenazantes y extorsivas, donde les dicen que si no entregan dinero, asesinarán a las personas retenidas.
Hasta el momento las autoridades guardan total hermetismo y no se conocen comunicados oficiales. Extraoficialmente se conoció que ya están en la búsqueda de los secuestrados.
Estas personas harían parte de grupos disidentes, los cuales se disputan el control del microtráfico y se dedican a la distribución del estupefaciente en la zona. En la región operan el grupo Oliver Sinisterra y Guerrillas Unidas del Pacífico.
PASTO (Colprensa).